• Noelia Cigüenza Riaño

jueves, 17 de diciembre de 2020

Muchas universidades, empresas y centros de investigación pararon sus procesos ante la incertidumbre que generó la pandemia

El parón económico que vivió el país desde marzo de este año para contener la propagación del covid-19 también enfrió a la innovación colombiana puesto que el número de solicitudes de patentes de invención realizadas por los nacionales cayó hasta 17,2% entre enero y noviembre.

Así lo demuestran los datos registrados por la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), entidad que ha recibido hasta el momento un total de 2.051 solicitudes, de las que 1.863 son de invención: 312 de ellas por parte de colombianos (-17,2%) y otras 1.551 de no residentes (0,1%).

“Muchas universidades, empresas y centros de investigación pararon sus procesos de patentamiento ante la incertidumbre que generó la pandemia, particularmente, en el primer semestre, cuando los recursos económicos se destinaron a atender las necesidades del covid-19. Esta situación ha mejorado en el segundo semestre, pero no de manera significativa”, explicó María José Lamus, superintendente delegada para la propiedad industrial.

Pese a esa caída generalizada, la Universidad Nacional siguió como la institución de educación superior líder en solicitudes de este tipo, con 14 presentadas a octubre. A esta, le siguió la estatal Ecopetrol, que en medio de la pandemia pidió otras 10; y la Universidad Eafit, con siete peticiones.

Detrás, aparecen empatadas con seis solicitudes la Pontificia Universidad Javeriana, la Universidad Antonio Nariño, la Universidad de los Andes y la Universidad del Valle. Y con cinco están la Universidad Francisco de Paula Santander y la Universidad Pontificia Bolivariana.

Si bien en los primeros 10 puestos del ranking solo aparecen dos empresas, la petrolera y Creating Ideas (con cuatro peticiones), estas son las que contabilizan el mayor número de solicitudes, con 105. Detrás se ubican las personas naturales, con 111; las instituciones de educación superior, con 81; y los centros de investigación, con cuatro.

Entre las compañías que solicitaron una patente este año también están Multiservicios de Ingeniería, Compañía Colombiana de Cerámica y Mercico, con tres peticiones presentadas cada una; y Compañía de Galletas Noel, Constructora Bolívar Calia y Productos Familia, con dos.

“Nos preocupan las cifras de las solicitudes de residentes. La cuarentena obligatoria paró mucho el desarrollo. A la par, esta situación debe generar una oportunidad para crear nuevos productos y servicios. El tema de la propiedad intelectual es el resultado final del conocimiento de inventores, empresas, por lo que juega un papel fundamental en la reactivación”, dijo Juan Carlos Garavito, director general de ClarkeModet Colombia.

No obstante, para Carlos R. Olarte, de OlarteMoure & Asociados, firma enfocada en propiedad intelectual, más allá del impacto de la pandemia, el número de solicitudes locales ya preocupaba en años anteriores debido a la “falta de apoyos”.

“Es un número que debería preocupar al Gobierno Nacional desde un punto de vista de un indicador de innovación. La pandemia del covid-19 lo que hizo es que dificultó la preparación de documentos para presentar patentes en general. No es que se innove menos, sino que hubo esa dificultad”, argumentó.

Respecto a los departamentos en los que se han solicitado más patentes en lo que va de año aparecen Bogotá, con 127 solicitudes; seguido de Antioquia, donde se pidieron 48; y Valle del Cauca, con 28. A estos, les siguen Santander (19); Cundinamarca (11); y Atlántico (siete).

Patentes internacionales se mantienen

Sin embargo, el impacto de la coyuntura del covid-19 a nivel global no se ha reflejado, por el momento, en las solicitudes de este instrumento de la propiedad intelectual que busca proteger las invenciones. En total, los no residentes presentaron en Colombia 1.563 patentes, de las que 1.551 fueron de invención, lo que representa un aumento de 0,1% frente a lo reportado a noviembre de 2019.

Esto se explica debido a que las solicitudes internacionales que llegan a Colombia a través del Tratado de Cooperación en materia de Patentes (PCT) se presentan, por lo general, hasta con un periodo de 31 meses antes, es decir, que las de no residentes que ahora aparecen reportadas en la Superintendencia se pidieron hace unos dos años.

“Debido a ese proceso, el impacto de las patentes de no residentes podría verse reflejado en el número de solicitudes en Colombia en el segundo semestre de 2021 o en el primer semestre de 2020”, indicó Lamus.

Entre las que se pueden encontrar hasta octubre de este año están las de la compañía multinacional sueca Ericsson, que presentó en 2020 49 solicitudes; seguida de la también empresa sueca Essity, con 45 peticiones; la compañía químico-farmacéutica alemana Bayer (23) y la francesa Saint-Gobain (19).

Por país de origen, destaca que el grueso de las solicitudes de patentes de invención que se realiza en Colombia provienen de Estados Unidos, donde se presentaron hasta octubre 555, una cifra mayor incluso a las pedidas en el mismo terreno local. Después, aparecen las peticiones suecas (103); las suizas (92); de Alemania, 84; de Francia, 70.

“Si bien el volumen de solicitudes que tramitamos desde Cavelier no se afectó, hemos visto que algunas de las que ya están siendo sometidas a examen o que ya fueron concedidas han sido abandonadas en algunas áreas de la tecnología, es decir, los clientes están siendo más cuidadosos en los portafolios que mantienen en determinadas jurisdicciones”, indicó Andrés Rincón, socio de patentes Cavelier Abogados, quien dijo que una patente dura hasta 20 años y muchos lo que han hecho es no pagar su anualidad.

Diseños industriales
Si bien es cierto que las solicitudes de patentes de invención cayeron, no pasó lo mismo con las de diseños industriales. Estas llegan a octubre hasta 653: 310 han sido solicitadas por residentes y 343 por no residentes. De acuerdo con la superintendente delegada Lamus, esto se debe a que este año se vieron diseños relativos a tapabocas , mascarillas o prendas de protección, entre otros, que se han hecho para protegerse del covid-19.