• Juliana Ramírez Prado

martes, 13 de octubre de 2015

Aunque DLP irá desapareciendo gradualmente  hasta enero de 2016, si hoy se hicieran las cuentas de la transacción,  Garrigues se convertiría en el mercado local en una firma de $17.000 millones, en un contexto donde la española espera cerrar este año una facturación superior a $8.000 millones y donde DLP pronostica lograr ingresos por $9.000 millones.

Con esto, Garrigues entraría al TOP 10 de los bufetes más grandes en Colombia por facturación, el cual actualmente está conformado por Brigard & Urrutia ($84.926 millones),  Posse Herrera Ruiz ($51.764 millones), Baker & Mc.Kenzie ($51.653 millones), Philippi Prietocarrizosa & Uría ($51.644 millones), Gomez-Pinzón Zuleta ($37.416 millones), Lloreda Camacho & Co ($19.752 millones), (Cárdenas & Cárdenas ($17.054 millones), Olarte Moure  ($13.783 millones), Araujo Ibarra & Asociados ($13.247 millones) y Norton Rose ($12.424 millones).

Javier Ybañez, socio responsable de la oficina local, manifestó que los equipos de abogados internos de DLP y su staff administrativo pasarán, con carácter general, a incorporarse a la plantilla de Garrigues Colombia, generando una plena integración y continuidad en el servicio de cara a los clientes y con este acuerdo la oficina de Bogotá pasará a contar con 40 abogados.

José Miguel de la Calle Restrepo e Ignacio Londoño Rivera , socios fundadores de DLP, se incorporarán como socios,  mientras Roberto Borrás Polanía, quien recientemente se había incorporado como socio de DLP, entrará como  counsel al igual que Humberto de la Calle.  

A este último se acordó  darle un trato preferencial para que se incorpore en un futuro con la máxima flexibilidad, de tal manera  que no interfiera con su trabajo como jefe negociador del proceso de paz en La Habana.

José Miguel de la Calle explicó que va a liderar la práctica de competencia, Londoño será el líder del área comercial y Borrás estará a cargo de la financiera.

 “El nivel de las operaciones en el país es notable. No obstante hemos considerado que necesitábamos consolidar nuestra presencia en Colombia, con la integración de profesionales del perfil de los que hoy se integran con esta operación que, además de complementar los equipos que ya teníamos, pudieran posicionarnos en un siguiente nivel, reforzando además determinadas áreas muy relevantes para nosotros, como son el derecho público, el derecho comercial, el derecho de la competencia o el derecho financiero”, expresó Ybáñez.

Por su parte, De La Calle indicó que esta movida tiene mucho que ver con que se busca  tener una presencia mucho más fuerte y hacer una oferta mucho más completa para el mercado local. 

“Vemos que hay diferentes movidas en el sector de servicios legales en Colombia con la llegada de firmas extranjeras o grandes alianzas y en esta medida buscamos convertirnos en un jugador más robusto”, precisó.

Y es que esta es una movida de grandes proporciones. Garrigues que fue fundada hace más de 74 años en España,  cuenta con más de 30 áreas de práctica y facturó en 2014 a nivel mundial US$345 millones ($1 billón). Así mismo, tiene más de 20 sedes  en Europa, África, Asia y América (Colombia - Bogotá, Brasil - Sao Paulo, México - México DF, Perú- Lima, EE.UU.-Nueva York).

Ybáñez aseguró que particularmente el mercado colombiano constituye en uno de los principales de la Región.

 “Creemos que Colombia es un país de muchas oportunidades para nuestros actuales y futuros cliente. Estamos para ayudarles en sus negocios desde el punto de vista legal y fiscal.  Nonos concentramos solo en clientes extranjeros, sino que ya una parte importante de nuestros clientes en Colombia son clientes locales”, dijo.

Ya el negocio se dio, ahora queda la expectativa de si Humberto de la Calle hará lo mismo que hizo su colega Néstor Humberto Martínez de alejarse de sus labores con el Gobierno para enfocar sus esfuerzos en la asociación que hizo su bufete Martínez Neira Abogados con la gigante DLA Piper.

Expansión
El modelo de expansión de Garrigues busca lograr una firma integrada. En esta medida,  las oficinas en Latinoamérica, son 100%  propiedad de la española y los socios de la organización lo son de la matriz del grupo.  Es decir, la bufete no busca tomar participaciones minoritarias en despachos latinoamericanos, ni formar alianzas en la región sino socios que cumplan con estándares para ser parte de él.

Javier Ybáñez
Socio Responsable de oficina local Garrigues
“DLP nos aporta una importante base de clientes especialmente en las áreas de derecho público, litigios, derecho de la competencia, derecho financiero y derecho comercial”.

Jose Miguel de la Calle
Socio Garrigues
“Esto no es una simple alianza sino una fusión completa. Hasta enero de 2016 vamos a hacer un desmonte paulatino de DLP para que quede solamente en el mercado la sociedad Garrigues”.