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jueves, 1 de febrero de 2024

La jueza Karen Steyn señaló que Trump no tenía perspectivas de obtener una compensación por cualquier angustia que pudiera haber sufrido

Un tribunal de Londres desestimó este jueves la demanda que interpuso el expresidente de los Estados Unidos Donald Trump contra un exespía británico, reclamo que estaba relacionado con el famoso expediente Steele, sobre los presuntos vínculos entre el Kremlin y su carrera hacia la Casa Blanca.

Trump, favorito del Partido Republicano para las elecciones presidenciales de este año, demandó el año pasado a Christopher Steele, exagente del MI6, así como a su firma de inteligencia empresarial Orbis en un caso de protección de datos. El expresidente señaló que había sufrido "daños y angustia significativos" por la publicación del expediente y solicitaba que un juez dictaminara que las declaraciones del informe eran falsas.

El que se conoció como el expediente Steele se filtró a Buzzfeed en enero de 2017 con acusaciones de que el servicio de seguridad ruso había comprometido la campaña presidencial.

"En realidad, el demandante busca conclusiones judiciales para reivindicar su reputación en circunstancias en las que no ha podido formular ningún remedio viable que tuviera posibilidades reales de obtener", señaló la jueza Karen Steyn, que desestimó la demanda y agregó que no determinará la veracidad del contenido del expediente.

Trump, que ya enfrenta varios juicios penales en Estados Unidos, afirmó anteriormente que estaba preparado para ir a Londres a testificar en el caso. Las acusaciones en su contra incluyen 91 cargos por delitos graves, entre ellos los de conspiración para anular las elecciones de 2020.

En un comunicado, un portavoz de la campaña de Trump dijo que el expresidente “seguirá luchando por la verdad y contra falsedades como las promulgadas por Steele y sus secuaces”. Los abogados de la firma de Steele argumentaron que el reclamo no tenía perspectivas razonables de éxito y que Trump simplemente estaba persiguiendo una “vendetta”.

Orbis dijo que el expediente nunca tuvo la intención de hacerse público y que Trump no podía responsabilizar a la empresa por la publicación de Buzzfeed.