• Santiago Diaz Gamboa sdiaz@larepublica.com.co

lunes, 5 de septiembre de 2022

La tecnología, según los expertos, ha sido un foco por parte del arbitraje desde la década de los 90, buscando agilizar procesos

La tecnología ha llegado a varios sectores legales con el paso de los años y en el arbitraje estas innovaciones no se han quedado atrás, pues procesos como la exhibición de documentos son ahora más eficientes, aunque presentan algunos retos.

Así lo planteó Rafael Bernal, árbitro nacional e internacional y exdirector del Centro de Arbitraje y Conciliación de la Cámara de Comercio de Bogotá, durante el séptimo Congreso Internacional de Derecho Empresarial, Contable y para los Negocios, organizado por la Cámara de Comercio de Cartagena, en el que explicó que la implementación de la tecnología ha sido un reto que se ha propuesto el arbitraje, desde la década de los 90 del siglo pasado.

“El tema de la tecnología no es la revolución de la pandemia, arrancamos hace mucho tiempo con la utilización de estos métodos en nuestra operación. Lo que hizo el covid-19 en este sentido fue explotar el correcto uso de la tecnología, pues al ser masivo, se presentan importantes ahorros en tiempos y costos”, precisó.

Desde 2013, dice Bernal, hay toda una guía para hacer efectivo el arbitraje de forma virtual. Las conciliaciones, por ejemplo, son un proceso que se vio impactado de forma positiva por las nuevas tecnologías; sin embargo, existen algunos retos que se exigen desde la práctica.

“La firma sigue siendo manual, algo por lo que nos preocupa que la fase final de algunos procesos se vea entorpecida por la necesidad de tener este requisito de forma presencial. De nada sirve hacer todo el resto del proceso virtual si al final las partes tendrán que reunirse, esto es, prácticamente, una zancadilla que no permite profundizar la estrategia”, anotó.

Otra de las necesidades expuestas por el árbitro es la prioridad de acabar con el archivo en papel, pues además de afectar el medio ambiente, se hace cada vez más complejo revisar los extensos documentos en la presentación de pruebas. No obstante, dijo, esta transición necesita una fuerte inversión si se busca mejorar.

De acuerdo con Bernal estuvo Antonio Pabón, árbitro nacional e internacional, que señaló la importancia de organizar la información, así sea de forma física o digital, pues en ocasiones el volumen de esta puede llegar a demorar la resolución de controversias.

“En la exhibición de documentos, uno de los trámites más complicados, la tecnología ha sido un soporte fundamental, aunque se debe mejorar en varios frentes. Por ejemplo, anteriormente, cuando los testigos presentaban la documentación, se entregaba una caja con muchos archivos en papel. Ahora, a pesar de la tecnología, se le entrega a los árbitros la misma cantidad de información pero en teras de almacenamiento”, explicó.
Pabón, a modo de sugerencia, dijo que los litigantes deberían solicitar solo lo necesario, pues al adjuntar todos los documentos del contrato es cuando se junta la información y el proceso se hace más lento.

“Los árbitros deben instruir a las partes, darles algunos indicadores bajo los cuales deberían reunir todos los datos. De esta manera los árbitros podrán recibir la información pertinente”, añadió.

Por su parte, Carlos Mayorca, árbitro nacional e internacional, dijo que para que la innovación tecnológica tenga futuro, es prioritario revisar cómo ha sido esta implementación en otros países de la región. Al igual que Pabón, estuvo de acuerdo con la iniciativa que deben tener los árbitros para dictar unas medidas a las partes en cuanto a reunir información. “A veces recibimos un link con los documentos solicitados que, por lo general, son enlaces temporales, y cuando se van a revisar las pruebas, ya no están. Por ello, a pesar de la buena función de la tecnología, se necesita que sea eficiente”.