viernes, 10 de marzo de 2023
La práctica de la gestación subrogada toma fuerza en el país, por lo que una ley regulatoria es esencial para llenar vacíos actuales
Obstáculos para el acceso a la licencia de maternidad por parte de padres únicos que hacen uso de la subrogación de vientres
En el último tiempo, el tema de la gestación subrogada, también conocida como alquiler de vientre, ha tomado fuerza en el país, esto a raíz de varios proyectos de ley que buscan regular esta práctica.
Sin embargo, existen muchas incógnitas frente al tema, por lo que es pertinente explicar en qué consiste el procedimiento, los requisitos, el marco legal y el contexto regional.
Para empezar, el proceso de la gestación subrogada es el procedimiento médico en el cual, mediante una inseminación artificial, una mujer queda embarazada con un óvulo ajeno al suyo y da a luz a un bebé para otra persona o pareja, las cuales se convierten en padres del bebé.
En cuanto al país, actualmente esta técnica se ha realizado desde hace cinco años, trayendo consigo grandes avances a la medicina colombiana. Efraín Méndez, médico especialista en bioética explicó que “los adelantos científicos en el campo de la fertilidad y reproducción asistida, son el resultado de avances biotecnológicos en el mundo de los últimos 30 años, y Colombia es reconocida por la calidad de sus médicos expertos, haciéndolo globalmente atractivo y con alto prestigio en estos procedimientos, asimismo, respetando la integridad y la dignidad de los pacientes involucrados.”
En cuanto a la legalidad, se han presentado varios proyectos de ley al Congreso de la República. Es importante que se regule este procedimiento, ya que Colombia se ha vuelto una región estratégica para que parejas de otros países realicen estos tratamientos, por lo que es primordial que se legisle la subrogación para garantizar los derechos de las portadoras gestantes, los niños y los padres. Sin embargo, el último proyecto presentado señaló que esta alternativa de subrogación uterina no será permitida para personas extranjeras, obstaculizando el acceso a este tipo de servicios en el país.
En cuanto a la región, varios países latinoamericanos ya han regulado la gestación subrogada como México, Argentina, Cuba, entre otros.
Las cifras de este proceso en el país, confirman la importancia de una ley regulatoria, ya que son alrededor de 35 clínicas de fertilidad en Colombia y de éstas más de 60% han incursionado en esta práctica, buscando abrir una puerta a las parejas colombianas y de otras regiones.
Los principales requisitos para que una mujer pueda hacer parte del proceso de subrogación, se encuentran el de tener un hijo nacido vivo, que no tengan más de tres partos o dos cesáreas, con una edad promedio de 20 a 37 años, que no hayan tenido abortos por causas desconocidas, como también, y no padecer enfermedades crónicas o infecciones contagiosas como el VIH o hepatitis.
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