¿Libertad de expresión o violencia de género?

 Las reacciones fueron diversas: primero Carolina Sanín elevó sus quejas e hizo lo propio en sus redes sociales, despachándose en contra de los estudiantes que, según ellos, en un acto jocoso y crítico publicaron una foto de ella con un ojo morado y la compararon con comida; los estudiantes replicaron e inclusive hicieron gestos simbólicos para demostrar que su actuar había sido inofensivo; hubo manifestaciones a favor y en contra de lo ocurrido por parte de algunos profesores de la Universidad de Los Andes y de sus directivos.

Los estudiantes apelaron a su derecho a la libertad de expresión e incluso al humor políticamente incorrecto. Otros sectores, no solo apoyaron a Carolina Sanín, sino que además señalan que la conducta de los miembros del grupo en Facebook refuerza estereotipos clasistas, machistas y que hace una clara apología a la violencia de género. 

Dentro del marco de la Constitución es claro que está prohibido cualquier tipo de discriminación por lo que frente a la libertad de expresión la Corte en la sentencia T-391 de 2007, entre otras, advirtió que la presunción de cobertura constitucional de la libertad de expresión no se predica de “la apología del odio nacional, racial, religioso o de otro tipo de odio que constituya incitación a la discriminación, la hostilidad, la violencia contra cualquier persona o grupo de personas por cualquier motivo (modo de expresión que cobija las categorías conocidas comúnmente como discurso del odio, discurso discriminatorio, apología del delito y apología de la violencia); (c) la pornografía infantil, y (d) la incitación directa y pública a cometer genocidio”.

Me pregunto, sometiéndome al escarnio público y las réplicas de mis congéneres, tanto o más feministas que yo, ¿cuál es el verdadero impacto de las publicaciones de los estudiantes? ¿Realmente incita a la hostilidad y violencia contra Carolina Sanín y el resto de las mujeres? Evidentemente son ofensivas y reprochables, pero ¿no visibilizan más la problemática de la violencia de género que es una de las estrategias para combatirla? Recuerdo campañas que mostraban mujeres con ojos morados, tal  como el meme de la discordia y varias propuestas artísticas en el mismo sentido ¿son una apología o una muestra crítica a la violencia de género?  

Tal vez estemos siendo puristas y la corrección política nos esté llevando a la mojigatería. Tan solo pensemos en cómo los atentados a las instalaciones del semanario satírico Charlie Hebdo por un grupo de extremistas resultó en hito de la defensa a la libertad de expresión en el mundo occidental y como en Colombia también clamamos “Je suis Charlie”, muy a pesar de que, según los criterios de la Corte Constitucional, seguramente sus publicaciones habrían sido calificadas de apología al odio, violencia y discriminación a la comunidad islámica.

Carolina Sanín merece una disculpa por el uso de su imagen sin permiso y haber sido ofendida, pero también es cierto que, sin entrar en apasionamientos, en estricto sentido no fue ella quien fue objeto de burlas, sino precisamente todo lo que ella misma censura y critica. La ridiculización fue al machismo, la violencia y la desigualdad de género.