Cepsa protegió Ecoblue en la SIC al presentar oposición a la marca Ecoblue Urea Automotriz

n la resolución 73879 de la Superintendencia de Industria y Comercio se definió el pleito marcario entre Yuli Cardona Zamudio Hernández y la Compañía Española de Petróleos (Cepsa). La mujer solicitó el registro de la marca Ecoblue Urea Automotriz, pero la empresa presentó oposición con fundamento en que reproduce por completo su marca Ecoblue.

La solicitante quería distinguir productos comprendidos en la clase 1 de la Clasificación Internacional de Niza, aditivos químicos para combustibles diesel. Al respecto, Cepsa argumentó que además de estar amparadas las marcas en la misma clase, por su semejanza fonética y ortográfica, los signos en cuestión producen un sonido idéntico que generaría riesgo de confusión en el público consumidor.

Yuli Cardona tuvo la oportunidad de responder a la oposición pero no lo hizo. En ese orden, la SIC procedió a realizar el estudio de registrabilidad que dicta la norma, para determinar que el elemento predominante es el denominativo en ambos casos, lo que significa que “el signo solicitado reproduce en su estructura gramatical el elemento esencial de la marca previamente registrada, por lo que no se puede establecer una clara diferenciación”.

En caso de que se otorgara el registro, el consumidor al encontrarse con el signo en solicitud en el mercado, podría considerar que se trata de una modificación del signo antecedente o de una nueva línea de productos. Por lo tanto, “las marcas en conflicto no pueden coexistir sin generar confusión con respecto a su procedencia empresarial”.

Dados los argumentos, la Dirección de Signos Distintivos de la Superindustria resolvió declarar fundada la oposición de Cepsa, mientras que negó el registro de la marca Ecoblue Urea Automotriz porque está dentro de la causal de irregistrabilidad.