• Natalia Arteaga

miércoles, 2 de julio de 2014

Los bienes de La Polar en Colombia no alcanzan para cubrir las deudas que tiene la compañía de origen chileno en territorio nacional.

De acuerdo con la Superintendencia de Sociedades, la firma que empezó operaciones en Colombia en 2010, tenía hasta finales de abril de 2014, un total en activos de $63.446 millones y unos pasivos por encima de $89.640 millones, o sea que le faltarían más de $26.194 millones para quedar al día con las obligaciones que hasta hoy mantiene.

¿Quién responderá por el excedente? Dice Alfredo Barragán, especialista en bolsa de la Universidad de los Andes, que dicho ‘hueco’ podría entrar a asumirlo la sede matriz, pero de acuerdo con el reporte, a ellos ya les adeudan más de $47.556 millones.

La situación de La Polar está enredada y en el reporte firmado por Angela María Echeverri Ramírez, superintendente delegada para procedimientos de insolvencia, se aclara que la firma tiene varias obligaciones vencidas desde hace más de 90 días en Colombia.

Del monto total de activos, solo $4.031 millones están en efectivo. ¿A quién deberían entregarse? ¿Cuáles deben ser las prioridades de pago entre los empleados, créditos y otros pendientes que tenía la compañía?

Daniel Santiago Acevedo, abogado experto en derecho laboral, explica que de acuerdo con la Ley de Insolvencias en su artículo 4, todos los bienes deberán ser distribuidos en igualdad de condiciones entre los colaboradores que quedaron cesantes y otros afectados, tras la liquidación judicial de la sede local del grupo austral.

Dice el experto que cuando una empresa entra en proceso de liquidación forzosa, lo primero que se debe hacer es definir la prioridad de pagos y para efectos de la normatividad colombiana, los empleados y los impuestos que tengan en su lista de pendientes, se convertirían en las prioridades para cubrir. Luego estarían los créditos u obligaciones financieras, que en este caso ascienden a $20.759 millones, destacándose como uno de los compromisos más grandes de la obligación.

Según Acevedo, como ya está en marcha el proceso de liquidación judicial, lo que tendrán que hacer los colaboradores de la compañía, es contratar un abogado que “le haga veeduría al proceso”.

Agrega que en este caso, “el efectivo de $4.031 millones, será el primer monto que tendrá que repartirse entre las personas que perdieron su empleo a causa del fracaso de la firma”.

El error de La Polar, afirma Leopoldo Vargas Brand, líder de Mall & Retail, fue que la ubicación les jugó una mala pasada. “Querían dirigirse a la clase media de Bogotá, pero abrieron sus tiendas en lugares donde los clientes son de estratos 2 y 3. Las tarjetas de créditos con marca propia, también fue otro descalabro porque era un mercado que ya estaba conquistado en su mayoría por Falabella y no lograron sacarle público”.

Santiago Roldán Zuluaga, docente de mercadeo de la Universidad Autónoma de Occidente, dice que la mayor falla de los chilenos estuvo en entrar ‘sin mayor ambición’ al mercado local.

“La Polar no fue ofensivo, estratégicamente hablando, cuando llegó al país hace cuatro años. Siento que ellos no tenían un plan muy definido en Colombia y por el contrario solo entraron a probar y se dieron cuenta que no era fácil competir en esta plaza.

Para Roldán Zuluaga otro de los aspectos es que tampoco segmentaron bien el mercado y que eso les costó en cuanto a imagen, porque finalmente, los clientes no supieron identificarlos y eso les restó puntos.

“Creo que la gente se confundió y no sabía que era lo que estaban ofreciendo. Eran una mezcla entre Falabella y Homecenter, y eso sin duda, fue una gran desventaja”.

Antecedentes
Aunque La Polar no logró despertar el interés de los compradores en Colombia, ya hay algunos retailers que le tienen el ojo encima a los 35.393 metros cuadrados que tenían en las seis tiendas de Bogotá.

Según Vargas Brand, los primeros 8.000 metros que serían conquistados, serían los de Centro Mayor, que ya habrían sido negociados por el retail paisa Flamingo.

La situación de la empresa en Chile tampoco está muy bien y el lunes fue aprobado el plan de reestructuración que contempla la emisión de un bono convertible en acciones, para que de esta manera, los bancos tengan un plazo mayor de tiempo para desprenderse de los títulos, si así lo decidieran, por un monto que va entre US$144,2 millones y US$180,25 millones. Su vencimiento sería en 2113.

Las Opiniones

Santiago Roldán Zuluaga
Docente de mercadeo de la U. Autónoma de Occidente
“La Polar no fue ofensivo, estratégicamente hablando, cuando llegó al país hace cuatro años. Siento que ellos no tenían un plan muy definido en Colombia y por el contrario entraron a probar y se dieron cuenta que no era fácil competirle la plaza a Falabella”.

Daniel Santiago Acevedo
Abogado experto en derecho laboral
“Cuando una empresa entra en proceso de liquidación forzoso lo primero que se debe hacer es definir la prioridad de pagos y, para efectos de la normatividad colombiana, los empleados y los impuestos se convierten en las deudas prioritarias para cubrir”.