“En Cuba no se discute el futuro de las Fuerzas”

El jefe de Estado explicó punto por punto el compromiso que firmó el gobierno con las Fuerzas Militares para la aplicación de la justicia especial para la paz a los policías y militares que hayan cometido delitos en el marco del conflicto armado. 

Uno de los aspectos que contempla a la hora de impartir sanciones, es que la Jurisdicción Especial de Paz no solo se tendrá en cuenta los rangos o jerarquías de los militares, sino también el grado de conocimiento que tenía el implicado sobre las órdenes que cumplía en medio de la guerra. 

“Había preocupación sobre si algún comandante de unidad, por ejemplo un comandante de división o de brigada o de batallón, sería responsable por los delitos de sus subalternos simplemente por ser su comandante”, dijo Santos. 

En diálogo con la Radio Nacional de Colombia y las emisoras de las Fuerzas Militares, el mandatario aclaró que contrario a lo que denuncia el Centro Democrático, este acuerdo no fue debatido con la insurgencia. 

“Las condiciones para los agentes del Estado no fueron discutidas con las Farc. Hay una distinción clarísima al tratamiento de las Farc y de la Fuerza Pública (…) ustedes jamás serán sometidos a la injusticia”, agregó. En ese sentido destacó que el porcentaje de la Fuerza Pública que ha cometido crímenes es mínimo frente a los de la guerrilla, pues en el marco de la guerra lo que hacen las Farc se presume ilegal, y lo que hace la Fuerza Pública, legal. 

Otro punto que aseguró, no se discute con las Farc, es la elección de los magistrados que integrarán el Tribunal Especial de Paz. Explicó que la guerrilla no los elegirá a dedo, sino que intervendrán terceros, probablemente de algún escenario internacional. “Aquí hay una equivalencia en los beneficios para que se respete que de ninguna manera los miembros de Fuerza Pública sean castigados con mayor severidad que miembros de las Farc”, reiteró Santos. 

Finalmente, el presidente calificó ésta época del año como una de las más tranquilas que ha vivido el país, con una disminución de las acciones ofensivas de las Farc en un 96 %.