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martes, 7 de diciembre de 2021

La lista sigue con el concierto para delinquir y la fabricación, porte o tenencia ilegal de armas de fuego, accesorios, partes o municiones

La reincidencia en los actos delictivos es uno de los grandes problemas del sistema penal en Colombia. Según cifras del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec), con actualización hecha en diciembre, en el país se han presentado 56.783 casos de reincidencia en lo corrido del año, cifra obtenida por el recuento de los delincuentes que cumplen penas intramurales, domiciliarias o que están en etapa de revisión.

Otro de los datos a tener en cuenta es que las cifras demuestran que los hombres son más propensos, no solo a cometer crímenes, sino también a reincidir en ellos. Las cifras arrojan que 53.295 de los casos (93%) pertenecen al sexo masculino, mientras las mujeres reincidentes ascienden a 3.488.

LOS CONTRASTES

  • Alejandro MejíaSocio en Cáez Muñoz Mejía

    “A la hora de legislar, el Congreso de la República crea más delitos y penas, además de más exigencias para obtener otras posibilidades como la prisión domiciliaria”.

  • Juan José CastroSocio director de Castro Muñoz & Abogados

    “En casos de reincidencia, los delitos pueden cometerse de manera independiente, pero la mayoría de veces se trata de conductas que están conectadas con otras”.

El reporte de la institución también develó cuáles son los 10 delitos con mayor reincidencia. De esta manera el hurto y fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o municiones encabezan la lista con 12.219 y 8.049 casos, respectivamente. Seguido de estos delitos están el de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes y el homicidio, los cuales cuentan con 7.057 y 6.438 casos de reincidencia, respectivamente.

La lista sigue con el concierto para delinquir y la fabricación, porte o tenencia ilegal de armas de fuego, accesorios, partes o municiones, delitos con 5.058 y 1.805 casos, respectivamente. Finalmente, se encuentran en los últimos lugares del top 10 la extorsión (1.378 casos), lesiones personales (1.299), violencia intrafamiliar (1.039) y , por último, fabricación, tráfico, tenencia de armas o munición de uso privativo de las Fuerzas Armadas (1.030).

Análisis de las cifras

Para el penalista Juan José Castro, si bien las cifras reveladas por el Inpec pueden tomarse por separado, su evaluación requiere que los delitos sean tomados en cuenta en su totalidad. “Ese análisis está hecho por delitos en particular, pero muchos actos delictivos pueden cometerse en el mismo caso”, dijo.

Según el experto, los hurtos, que están en el primer lugar de las 10 conductas con mayor reincidencia, están cometidos con armas irregulares, las cuales, bien sea de fuego o traumáticas, deben estar reguladas y autorizadas y los delincuentes las obtienen, muchas veces, en el mercado negro.

“Se puede ver cómo en algunos casos con arma de fuego, además de un hurto agravado y calificado, la persona podrá enfrentar también el porte ilegal de armas. Además si, por ejemplo, el delito se da entre dos o más personas se incluye el concierto para delinquir dentro de los procesos. Son conductas que van muy de la mano y el hurto es un delito con muchos adicionales” aseguró Castro.

De esta manera, anotó, los problemas de seguridad urbana no deberían atomizarse en delitos individuales, sino en conductas que, en la mayoría de los casos, podrían acarrear delitos adicionales.

Posibles causas

Una de las posibles causas que explican el fenómeno de la reincidencia puede ser la impunidad. Castro aseguró que ese podría ser el núcleo del problema, pues la dureza para los delitos está presente y estipulada. “No se trata de un problema de severidad porque con el paso de los años a los reincidentes no se les otorgan beneficios y tienen que pagar la pena en la cárcel”. El abogado afirmó que durante más de tres décadas se ha pensado que el problema es la gravedad de las penas y agregó que lo único que se ve es un aumento de las conductas criminales.

“El problema es que en Colombia las penas y leyes no se aplican y esto da como resultado unas altas tasas de impunidad. Una legislación drástica no es sinónimo de aplicación efectiva”, agregó. Lo anterior podría darse por una hiperinflación legislativa y el exceso de creación de delitos o la eliminación de beneficios.

Por otro lado, la impunidad referida por el abogado se daría por la importante congestión del sistema judicial. “Así la Fiscalía y los jueces tengan la mejor intención, el problema es que hay tantos casos que no se pueden sacar adelante, pues muchas personas han entrado a la cárcel varias veces y sus procesos no avanzan”, puntualizó.

Situación carcelaria

Según el Inpec, las cifras con corte a diciembre de este año arrojan una población intramural de 98.081 personas. Esta cifra representa una sobrepoblación de 15.755 reclusos, si se tiene en cuenta que la capacidad para los reos es de 82.296, lo que implica un hacinamiento de 19,14%. Sobre la situación por género dentro de las cárceles, hay un total de 91.198 hombres recluidos en los más de 120 establecimientos carcelarios del país. Las cárceles, por otro lado, reportan un número de mujeres recluidas mucho menor, pues en las penitenciarías solo hay 6.883 reclusas.

En cuanto a los delitos de las cifras intramurales, el homicidio y el hurto repuntan con el mayor número de casos, pues se contabilizan 26.295 y 22.004, respectivamente. El concierto para delinquir y el tráfico de estupefacientes son también delitos comunes.

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