• Bloomberg

jueves, 28 de abril de 2022

Los comentarios de quien será el nuevo dueño de la red social desencadenaron una ola de matoneo digital en contra de la ejecutiva

La crítica de Elon Musk a una decisión de contenido tomada por el equipo legal de Twitter fue seguida por una ola de trinos abusivos dirigidos contra la principal abogada de la compañía, Vijaya Gadde.

Musk, que tiene 86,4 millones de seguidores en Twitter y ha llegado a un acuerdo para comprar la empresa por US$44.000 millones, a menudo utiliza el sitio como una forma de criticar las decisiones de Twitter, especialmente cuando implican prohibir cuentas de personas que violan las reglas de la plataforma, algunas de ellas a quienes Musk ve como injustamente marginadas.

Esta semana criticó una decisión que tomó la compañía en 2020 de bloquear una historia del New York Post sobre Hunter Biden. Llamó a la medida “increíblemente inapropiada”. Si bien no identificó a Gadde por su nombre, la publicación fue en respuesta a un artículo en el que se la menciona de manera destacada.

Suspending the Twitter account of a major news organization for publishing a truthful story was obviously incredibly inappropriate

— Elon Musk (@elonmusk) April 26, 2022

Musk estaba respondiendo a un tuit de Saagar Enjeti, presentador de un podcast político, quien a su vez hacía referencia a un informe de Politico de que Gadde rompió a llorar en una reunión con su personal esta semana.

“Vijaya Gadde, la principal defensora de la censura en Twitter que iluminó al mundo con el podcast de Joe Rogan y censuró la historia de la computadora portátil de Hunter Biden, está muy molesta por la toma de control de @elonmusk ”, tuiteó Enjeti.

La historia del Post a la que hace referencia Enjeti había alegado que Biden, hijo del entonces candidato presidencial Joe Biden, tenía conexiones inapropiadas con un ejecutivo de una empresa de energía ucraniana. Twitter luego revocó la medida, pero no antes de ser acusado de censurar información que podría haber perjudicado a un candidato demócrata.

El comentario de Musk fue seguido por un aluvión de comentarios negativos de los usuarios de Twitter. Algunos usaron improperios o insultos racistas refiriéndose a la herencia india de Gadde, incluidas palabras como "curry" y referencias al sistema de castas de la India. Otros usaron groserías o lenguaje despectivo y la culparon por haber “destruido innumerables cuentas de @Twitter por decir la verdad”. Algunos pidieron que la despidieran o sugirieron que debería irse sola. Algunos de los tuits abusivos se eliminaron más tarde por violar las reglas de Twitter.

El miércoles, Musk publicó un tuit adicional con un meme sobre el "sesgo de izquierda" de Twitter. Presentaba el rostro de Gadde y provocó una reprimenda del exdirector ejecutivo de Twitter, Dick Costolo, quien preguntó por qué Musk estaba “convirtiendo a un ejecutivo en la empresa que acabas de comprar en blanco de acoso y amenazas”.

what's going on? You're making an executive at the company you just bought the target of harassment and threats.

— dick costolo (@dickc) April 27, 2022

Twitter, con sede en San Francisco, se negó a comentar.

Musk ha dicho a menudo que su objetivo es hacer de la plataforma de redes sociales un bastión de la libertad de expresión. “Por 'libertad de expresión', simplemente me refiero a lo que se ajusta a la ley”, dijo en un tuit el martes. “Estoy en contra de la censura que va mucho más allá de la ley”. En algunos casos, sus comentarios encienden a su considerable base de seguidores para burlarse públicamente de las personas a las que ha criticado, desde un funcionario de salud local al comienzo de la pandemia hasta el actual director ejecutivo de Twitter, Parag Agrawal.

Algunos comentarios racistas que siguieron a su tuit del martes también hicieron una conexión con Agrawal, quien también es de origen indio. Musk también ha criticado a Agrawal, publicando un meme el año pasado superponiendo su rostro al del dictador ruso Joseph Stalin. La imagen manipulada mostraba a Agrawal, exdirector de tecnología de Twitter, purgando al cofundador y exdirector ejecutivo Jack Dorsey, tal como lo hizo Stalin con el jefe de la policía secreta soviética Nikolai Yezhov.

Algunos usuarios instaron públicamente a Dorsey a asumir la responsabilidad de las decisiones durante su mandato, dado que Gadde le reportaba, o al menos defender su trabajo. Pero guardó silencio, incluso cuando otros empleados, incluido el exdirector ejecutivo Ev Williams, intervinieron para defenderla.

Los comentarios de Musk sobre la decisión legal coincidieron con una presentación de valores el martes con detalles de la transacción de Twitter, incluida una sección sobre "anuncios públicos" que tenía una limitación sobre lo que Musk puede twittear. Todavía se le permite discutir el acuerdo en Twitter, pero no en términos despectivos, según la presentación.

“Se le permitirá al inversionista de capital emitir tuits sobre la fusión o las transacciones contempladas en el presente, siempre que dichos tuits no desacrediten a la empresa o a cualquiera de sus representantes”, según la presentación. No está claro si su referencia a Gadde violaría esos términos o qué le sucedería a Musk si lo hiciera.

John C. Coffee, profesor de la Facultad de Derecho de Columbia, dijo que es poco probable que Twitter ponga en peligro el acuerdo al denunciar a Musk por los tuits.

“Incluso si Musk violó la cláusula contra el menosprecio, lo último que haría Twitter sería cancelar un acuerdo que probablemente sea demasiado caro”, dijo.

Y es difícil saber qué obtendría Twitter de tal movimiento, dijo Coffee. “Si fuera a decir que violó la cláusula antidesprecio, no hay pena natural que le corresponda”.

Al adquirir Twitter, Musk prometió convertirlo en una plataforma para la libertad de expresión con pocas restricciones, una medida que, según él, es "esencial para una democracia que funcione".

Musk definió el objetivo de Twitter en un evento TED a principios de este mes, diciendo: “Una buena señal de si hay libertad de expresión es: ¿Alguien que no te gusta puede decir algo que no te gusta? Si ese es el caso, entonces tenemos libertad de expresión”.

Pero aquellos que han dicho cosas que a Musk no le gustaron han visto su reputación destrozada públicamente. Vernon Unsworth, un espeleólogo británico que ayudó a rescatar a 12 niños atrapados en Tailandia, calificó los esfuerzos de Musk para ayudar como un "truco de relaciones públicas" en 2018. Musk tomó represalias llamándolo "pedo".