Agregue a sus temas de interés

Agregue a sus temas de interés Cerrar

  • Jorge Hernán Peláez

sábado, 24 de febrero de 2018

El último semestre habría mejorado mucho para la industria caleña.

El alcalde de Cali, Maurice Armitage, tiene experiencia en el sector privado y por eso cree que la eficiencia del modo de trabajo de los empresarios se puede trasladar a la política. Así lo explicó en Al Paredón, donde también destacó la importancia de la educación.

¿Cómo va Cali?

Va mejorando mucho y hemos progresado en cultura, en credibilidad en las instituciones. La gente está creciendo más en la administración, es una administración honesta, honrada, que nos está haciendo politiquería, yo creo que lo más importante que ha pasado en Cali es que la gente está creyendo y una demostración de eso es que el año pasado subimos los ingresos más de 20%, esto es una demostración de que la gente está creyendo en su alcalde, está creyendo que las cosas se están manejando honestamente.

En educación estamos invirtiendo lo que ninguna ciudad en Colombia, que es medio billón de pesos en reformar escuelas y traer escuelas sanas.

Desgrane esa inversión de $500.000 millones...

De los $350.000 millones que fue préstamo, le puedo decir que casi $200.000 millones se gastan en cosas físicas, en infraestructura y el resto se gasta en calidad educativa, en deportes y en cultura, es así más o menos.

¿A cuántos colegios llega esa inversión?

Se ha venido disminuyendo lo que es la educación que se hacía donde se subsidiaba a estudiantes, eso se llamaba la contratada, que es una privada, habiendo proliferación de colegios privados donde se hacía mucha corrupción, colegios de garaje donde políticamente se les daba mucho, eso lo hemos venido acabando.

Hoy en día estamos aspirando a 170.000 muchachos, donde estamos esperando que tengan buenas instalaciones donde la gente se sienta bien en su colegio, donde el colegio se sienta el centro de la comunidad, es bien importante lo que estamos haciendo y esa educación e inversión nos está llevando a que el colegio se vuelva el centro de la comunidad.

Bilingüismo y acceso a tecnologías son cosas por mejorar para aprender al mismo nivel internacional, ¿cómo vamos en eso?

En el gobierno de la Alcaldía pasada el doctor Guerrero dejó una estructura muy bien montada de computadores para colegios públicos, teníamos las dificultades de la redes de conexión, porque esas redes del colegio no funcionan mucho, eso se ha venido mejorando a través de la Secretaría de desarrollo y las Secretarías de las TICS que montamos. Continuamos en el bilingüismo, acabamos de darle prioridad porque tenemos como meta la capacidad de empleo.

¿Cómo siente a los empresarios y cómo va la industria en Valle del Cauca?

Acabamos de pasar un año duro. Desde mi punto de vista personal, no como alcalde, estamos metidos en el negocio del acero, del cemento y del azúcar y el acero el año pasado tuvo un año muy difícil aunque en el último semestre mejoró mucho por los precios internacionales.

El sector del cemento está difícil, competido, mucha oferta, poco consumo, está frenado. En azúcar también hemos visto dificultades y preocupa muchísimo, porque si hay alguna cosa que afecta a Cali es que el sector del azúcar entre en crisis.

Por el resto veo una gran emoción, la Alianza del Pacífico le está creando a Cali unas oportunidades maravillosas: el sector de pollos y huevos en Valle está creciendo mucho y por la cercanía con Buenaventura.

¿Le recomienda a otros empresarios ingresar a la política?

Es una cosa angustiosa y difícil, yo me metí ya de viejo en esta cosa, tengo 73 años, pero creo que los colombianos y los empresarios tenemos una obligación de no criticar sino ayudar y tenemos un compromiso.

Creo que la forma de arreglar la mala política es que el empresario pequeño o grande sepa lo que es generar un empleo, la angustia de una nómina, la angustia de sacar una empresa adelante, si a él lo trasladan al municipio, a la alcaldía o a la gobernación puede aportar muchísimo, la mayoría de los políticos en su vida han tenido que correr a hacer una consignación, hacer un pagaré para tener una fábrica andando, no conocen esa cosa y creo que esa eficiencia del empresario la puedes trasladar al municipio o una alcaldía.

Yo me he encontrado con paredes en eso, no es lo mismo lo privado que lo público; en lo privado es hágase y se hace y las cosas funcionan, en lo público no, pero poco a poco esa inercia de lo privado también va cambiando lo público, yo lo siento en la Alcaldía. Creo que esa inyección de lo privado funciona mucho, la experiencia lo privado le da un aire a lo público.

LA REPÚBLICA +

Registrándose puede personalizar sus contenidos, administrar sus temas de interés, programar sus notificaciones y acceder a la portada en la versión digital.