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jueves, 5 de agosto de 2021

Las 16 plazas, que estarán disponibles en la Cámara de Representantes, solo están destinadas para las personas que hayan sido víctimas del conflicto armado

En la Plaza de Bolívar, el Congreso llevó a cabo ayer un evento legislativo y simbólico: la firma del acto que crea 16 curules de paz para las víctimas del conflicto armado. El presidente del Senado, Juan Diego Gómez; y la presidente de la Cámara de Representantes, Jennifer Arias, fueron los encargados de firmar el documento y remitirlo a la Presidencia de la República para su trámite.

“Estamos cumpliendo con los fallos judiciales, como debe ser, en una interpretación amplia que nos ayude a mejorar las figuras e instituciones de los acuerdos para buscar la redención de la paz, para avanzar en la ruta segura. En el Congreso tenemos 10 congresistas de las antiguas Farc, hoy partido Comunes, y con esas 16 curules se equilibra la cancha, para que vengan a plantear políticas públicas”, dijo Gómez.

A propósito de este hito, Asuntos Legales le presenta un ABC con los puntos básicos sobre este tipo de curules, cuyo futuro está en las manos del presidente Iván Duque.

¿Cómo revivieron las curules?

La discusión por las curules de paz, incluidas en el Acuerdo de Paz, tuvieron un cese en 2017 cuando el Congreso no aprobó su promulgación. Roy Barreras impuso una tutela contra el hundimiento del proyecto, el cual, al parecer, no vio la luz hace cuatro años por apenas un voto. La Corte Constitucional revisó el recuso judicial y dio la razón al parlamentario el pasado 21 de mayo y revivió el acto legislativo para que el Congreso cumpliera su trámite.

Barreras explicó que “las curules fueron aprobadas en 2016 con un acto legislativo de mi autoría pero fueron saboteadas en su momento y durante esos tres años empezó una batalla jurídica en la que todo tipo de argumentos se impusieron para evitar la representación de las víctimas. Finalmente, logramos resolverlo con la tutela conocida en la Corte Constitucional que garantizó el derecho de 9 millones de víctimas de tener esa representación en el Congreso”.

¿Cómo funcionarán?

Las curules fueron creadas exclusivamente para las personas que han sido víctimas del conflicto armado en algunas zonas del país y los elegidos podrán desempeñarse como parlamentarios en la Cámara de Representantes. “Solo podrán hacerlo aquellos que estén escritos en el registro de víctimas. No podrán elegirse ni los incorporados ni los reinsertados ni nadie que haya tenido vínculos con grupos ilegales, pero tampoco podrán hacerlo aquellos que hayan sido candidatos por cualquier otro partido político”, agregó Barreras.

Sobre la votación, se conoció que todos los ciudadanos de los territorios adjudicados a los curules podrán hacerlo. Tendrán la oportunidad de acudir a las urnas dos veces: una por las curules para las víctimas; y otra, por el representante a la Cámara que corresponde a su región.

¿Cuál es su duración?

Dos períodos serán los destinados a ocupar las plazas del Congreso asignadas para las víctimas. En un principio, se determinó que fuera durante los cuatrienios comprendidos entre 2018-2022 y 2022 y 2026. La Corte Constitucional, no obstante, salió al paso de esta proposición y movió cuatro años la vigencia de los periodos: 2022 a 2026 y 2026 a 2030. Sobre cuándo se llevarían a cabo estas elecciones, se conoció que se realizarán en marzo, el mismo día de las elecciones parlamentarias, para reducir costos.

¿Cuáles son las regiones?

Uno de los puntos más importantes de las curules para la paz es que se darán solamente en determinadas regiones del país. Específicamente en las que hubo más violencia hasta la llegada de los Acuerdos de Paz en 2016.

“Para nueve millones de personas que han sido víctimas de la violencia en Colombia significa la oportunidad de venir directamente al Congreso de la República a defender sus derechos y la reparación integral de sus territorios en el Norte del Cauca, en el sur de Nariño, en los Montes de María y el Catatumbo. Ahora hay una posibilidad de que llegue la carretera, vía terciaria y demás proyectos que reclamarán los ocupantes de las curules, quienes defenderán la presencia del Estado en sus territorios”, dijo Barreras.

Las plazas para la Cámara estarán disponibles para 170 municipios del territorio nacional, algunos de los cuales aún siguen marcados por la violencia y la pobreza. Se espera que, sobre todo las minorías, como los indígenas, lleguen a ocupar los puestos.

LOS CONTRASTES

  • Iván DuquePresidente de la República

    “Lo más importante es que como país garanticemos que esas curules sean para las víctimas, para las personas que tantos años fueron laceradas por el terrorismo”.

  • Jennifer AriasPresidente de la Cámara de Representantes

    “Nuestro trabajo es que todas esas víctimas que sufren puedan verse representadas en el Congreso, pues siguen sufriendo y no pueden ser revictimizadas”.

Contradictores de las curules

El debate suscitado por los Acuerdos de La Habana no ha decrecido con los años. Figuras como Álvaro Uribe afirman que las curules “aumentarán la participación de las Farc y sus aliados. “Hay que decir que la razón de fondo la oposición del uribismo es que las víctimas implican el reconocimiento del conflicto armado y la negación de la violencia en el país ha sido un paradigma ideológico. Ellos han hecho lo posible para oponerse tanto al Acuerdo como a las víctimas”, dijo Barreras.

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