• Carlos Jaramillo Palacio

lunes, 22 de abril de 2024

La movilización vista en la calle es un mensaje muy potente para el Presidente, que debería entender que no es un tema de izquierda o derecha

Aunque las cifras oficiales de la gente en la calle hablan de dos millones de personas que marcharon contra el Gobierno y el jefe de Estado, y el presidente Gustavo Petro trató de minimizarlas asegurando que fueron 250.000, lo más importante de todo es que las marchas de ayer fueron un hecho político clave, que sin lugar a dudas marca un antes y un después en el gobierno de Petro.

Incluso, dos funcionarios de su Gobierno, Laura Sarabia y Luis Fernando Velasco, reconocieron la fuerza de la marcha. "Hoy debemos tener la grandeza de reconocer que muchas personas se movilizaron, que lo hicieron con todas las garantías y pudieron expresar su descontento. Esta es una semana que como gobierno debemos afrontar en reflexión y autocrítica", escribió la directora del Dapre en X, mano derecha del Presidente.

Y es que el primer mandatario sigue cayendo en los índices de popularidad, de acuerdo con la Invamer Poll de abril; su desaprobación llegó al 60%. A esto se suma, entre otras muchas cosas, el informe de la Contraloría de este lunes frente a la ejecución del Presupuesto General de la Nación, en el que habla que el porcentaje de ejecución en inversión a 31 de marzo de 2024 fue de 9,1%, el más bajo en comparación con las últimas tres (3) vigencias; 2021, 10,3%; 2022, 16,3%; 2023, 11,5%.

Lo cierto del caso es que las marchas mandan un mensaje grande que el Presidente deberá entender, sobre todo para muchos que entendieron que la movilización es el camino para expresar ese descontento, ya que ayer muchos marcharon por primera vez.

Los ríos de gente en ciudades como Bogotá, Medellín y Cali, por solo citar algunas algunas, va mucho más allá de lo que el Presidente quiere minimizar y ridiculizar, como quedó en evidencia en el trino que mandó ayer en la tarde. Publicó en X el mensaje “la clase dominante”, acompañado de un video del asesinado humorista Jaime Garzón en el que, de forma sarcástica, Garzón realizaba una parodia, en ese momento, del exministro Rudolf Hommes.

Y en la tarde de ayer volvió a hablar de la marcha y siguió demeritándola.

“Las manifestaciones contra el gobierno tuvieron más o menos 250.000 personas en todo el país, fueron fuertes en su orden en Medellín, Bogotá y Bucaramanga. En las demás ciudades, alcanzando 18 sitios, fueron débiles. A las marchas se les respetó al máximo como se seguirá haciendo. Una de las características centrales de mi gobierno es respetar la libertad de expresión y los derechos de la gente. El principal objetivo de las marchas es gritar "fuera Petro" y derrocar el gobierno del cambio. Este proceso ya inicio y es un golpe blando que anule la decisión popular por el cambio en el año 2022”, escribió.

Varios de los analistas políticos, efectivamente, coinciden en decir que ahora ‘todo puede ser a otro precio’.

"Son unas marchas muy plurales en donde vimos personas de edades distintas, orígenes distintos, intereses distintos, incluso las arengas son arengas muy diferentes. Es que cada quien salió a las calles por sus propias razones: oponerse a la reforma a la salud, la pensional, otros con una lógica muy política”.

"Es como la manifestación de que somos una sociedad plural y que muchos grupos de distintos orígenes están buscando una voz para manifestar un descontento con una lógica que es muy interesante y es que no hay un liderazgo político, único sino hay muchos liderazgos distintos, convocantes distintos", aseguró en una entrevista con Telemedellín Paca Zuleta, analista política y directora de Escuela de Gobierno de la Universidad de los Andes.

Otros, en tanto, opinan y piensan las marchas le demostraron a la gente el poder popular y le “están dando de su propia medicina a Petro”, haciendo referencia al activismo de siempre del Presidente y su gusto por la movilización popular.

La marcha, además, sirvió para que el Presiente se dé cuenta que el descontento no es un tema de izquierda o derecha.

Estas contaron con la participación de las 'Batas Blancas', tras una convocatoria de la Asociación Colombiana de Cirugía y la Asociación Colombiana de Sociedades Científicas, que agrupa a 69 organizaciones de médicos especializados en Colombia. Adicional a los camioneros, enfermeras y geólogos.

La gran pregunta que surge en esta situación es que va a pasar ahora, pues el Presidente sigue con su radicalización.

“Le solicitaré este primero de mayo a los trabajadores y trabajadoras que me permitan hablar en su tribuna de la plaza de Bolívar. Iré como antes, caminando, espero que me acompañen en todo el país, será un caminar por la dignidad laboral”.

“Será un día para que todas y todos los trabajadores de la salud salgan por su estabilidad laboral a punto de conseguirse. Por el derecho a pensionarse, por un mejor salario y por créditos baratos para la economía popular. Que el campesinado salga a la ciudad y los indígenas por la reforma agraria”.