EPM
jueves, 4 de noviembre de 2021
Los resultados del estudio arrojaron falencias en el cumplimiento del Convenio Marco de Relaciones entre EPM y Medellín
La Superintendencia de Servicios culminó la evaluación integral a Empresas Públicas de Medellín, EPM, con la cual se buscaba calificar al gobierno corporativo, las finanzas y la prestación de servicios de acueducto, alcantarillado, energía y gas combustible durante 2020 y parte de 2021.
Los resultados del estudio arrojaron falencias en el cumplimiento del Convenio Marco de Relaciones entre EPM y el municipio de Medellín, además de contravenciones regulatorias en las prestación de los servicios públicos. También se hicieron presentes fallas en los reportes de información.
Otro de los hallazgos de la entidad fue la distribución, desde 2016, de 55% de los excedentes financieros anuales, lo cual representa un porcentaje excesivo si se tiene en cuenta que la empresa, por normas generales, debe distribuir máximo 30% de dichos excedentes. Estos movimientos fueron autorizados por el Concejo de Medellín.
Adicionalmente, el incumplimiento del Convenio Marco de Relaciones entre EPM y el Medellín tiene como consecuencia la afectación de la calificación crediticia y acceso a productos financieros como seguros y nuevos créditos.
"El debilitamiento del gobierno corporativo de EPM ha afectado la imagen de la empresa y la confianza del mercado en ella. Aun cuando se evidencia que existen otras calificadoras que no han modificado su postura, es claro que hay un riesgo en la percepción que el mercado tiene como consecuencia del incumplimiento de este instrumento. La disminución de la calificación de riesgo implica un encarecimiento de la deuda para EPM, lo que puede generar dificultades al momento de atender los diferentes compromisos contraídos", afirma la entidad.
Hallazgos en servicios públicos
La Superservicios aseguró que, presuntamente, EPM cometió contravenciones con relación a las normas de retiro, revisión, reposición y cobro de medidores , las cuales están establecidas en la regulación de la Comisión de Regulación de Agua Potable y Saneamiento Básico.
Algunos medidores, según el reporte, fueron cobrados por adelantado en la factura de los usuarios o, en otros casos, cobrados y no suministrados. La calidad del agua, además, en algunos municipios como Envigado, está por debajo de los estándares, lo cual la hace no apta para el consumo.
"Respecto a las condiciones de calidad en la prestación del servicio de energía, la superintendencia evidenció que, en 2019, EPM registró una duración promedio de interrupciones superior a la establecida en el indicador SAIDI para su mercado de operación", se puede leer en el reporte.
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