miércoles, 23 de diciembre de 2020
Ciertamente, la profesión del abogado es de las profesiones liberales en donde prevalece el ejercicio del intelecto. En efecto, los abogados que se destacan son aquellos que utilizan los métodos de interpretación de la Ley, que consultan y están actualizados en Jurisprudencia y que soportan, su argumentación e investigación en Doctrina.
Ahora bien, actualmente se esta analizando la implementación de Legaltech, entendida como, los desarrollos tecnológicos para facilitar la oferta de servicios legales. Dicho sea de paso, la tecnología esta en función de todos los modelos de negocio incluida la oferta de servicios legales, es decir, tecnologías disruptivas tales como, Regtech, Suptech, Blockchain, Smart Contracts, Inteligencia Artificial, Realidad Aumentada, entre otras.
Contrario a lo anterior, vale la pena interrogarse si ¿Las grandes, medianas y pequeñas firmas de abogados están aplicando la tecnología en la oferta de servicios legales? La respuesta a este interrogante puede ser anticipadamente negativa, en la medida en que, sea por factores exógenos o endógenos, muchos servicios legales se siguen ofreciendo de forma tradicional, sin configurar avances en innovación de cara a los clientes.
Justamente, la crisis sanitaria derivada por la propagación del virus Covid-19, pone en evidencia el valor agregado que pueden llegar a tener los abogados que están a la vanguardia de esquemas tecnológicos, sincronizados con los servicios legales. Desde luego, se destaca que, ya se están empezando a implementar procesos judiciales y arbitrales alineados con tecnología, de igual forma, ya se están ofreciendo algunos servicios legales a través de aplicaciones o innovaciones digitales, sin embargo, dichas iniciativas requieren unir esfuerzos no solo desde la infractructura en la creación de dichas iniciativas, sino en cambios de paradigmas corporativos y personales al momento de ofrecer los servicios legales.
¿ El modelo Delta es necesario en la oferta de servicios legales en la actualidad?
En el año 2018, en la Universidad de Georgetown a través de la profesora Alyson Carrel, se empieza a discutir sobre el modelo Delta, que busca entre otras finalidades, diseñar estrategias centradas en la relación con el cliente, de manera que, se incorpora un triangulo equivalente a la letra Delta para representar las alternativas válidas al momento de ofrecer los servicios legales. Por consiguiente, se deben tener en cuenta las siguientes variables, The People, que significa entender la relación con los clientes, con los pares de los abogados y con ellos mismos. The Process, que tiene relación con la prestación de los servicios legales de forma eficiente y eficaz. Por último, The Practice, que representa el conocimiento, la investigación y la clara comunicación de la Ley.
En conclusión, la implementación del Modelo Delta, es justamente necesaria en la actualidad de cara al ofrecimiento de los servicios legales, es decir, que los abogados no solo deben ser conocedores y practicantes de la Ley, la Jurisprudencia y la Doctrina, como tampoco solo deben alinear los servicios legales con tecnología, sino que, efectivamente deben enfocarse en las relaciones con el cliente basados en la trasformación y cambios que significa el modelo Delta, pero sobretodo, aplicando las tres variables en conjunto, esto es, The People, The Process y The Practice, que sincronizadas se orientan principalmente en la importancia capital del cliente en todos los nuevos modelos de negocio.
