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viernes, 7 de julio de 2023

La historia de la red ferroviaria en Colombia se remonta a la segunda mitad del siglo XIX cuando los departamentos iniciaron por montar los rieles para transportar bienes a través del territorio nacional. Sin embargo, las carreteras, la gran competencia de este modo de transporte, han tenido más inyección de recursos por parte del Estado, por lo cual se fueron dejando de lado los proyectos férreos. El actual Ministro de Transporte ha mencionado que, en la última década, la destinación presupuestal para este modo no supera el 1,8% del total de la inversión pública anual del sector.

Colombia cuenta con una extensión de 1.310 km de vías férreas activas y 16 tramos ferroviarios inactivos que cuentan con una extensión de 2.297 km, de los cuales 2 tramos se encuentran administrados por la ANI y 14 tramos por el INVIAS. Según el DNP, en 2022 el modo férreo movilizó en promedio el 21% de la carga total del país. El uso de este sistema férreo permitiría una reducción de costos en hasta 26% para el año 2030. Así, en vista de la búsqueda de eficiencias en el sistema de transporte y en la construcción de un sistema intermodal en Colombia, retomar las redes ferroviarias en Colombia resulta una gran oportunidad.

En ese sentido, el Plan Nacional de Desarrollo (“PND”) reconoció esta necesidad al introducir varios artículos encaminados a facilitar la estructuración y financiación exitosa de estos proyectos. Por una parte, buscando la sostenibilidad de los sistemas de transporte público en operación, la Nación ofrece una cofinanciación hasta del 50%, por una única vez, del valor total de las inversiones correspondientes a, entre otros, infraestructura de sistemas para el recaudo, gestión y control de flota, vehículos automotores de cero o bajas emisiones ya vinculados, y adquisición y repotenciación de material rodante para sistemas férreos.

Esto, siempre que dichas inversiones no hayan sido incluidas en los convenios de cofinanciación iniciales de los respectivos sistemas. Así, la Nación puede aportar hasta el 50% del CAPEX que no haya sido previamente cofinanciado, incluso cuando se trate de inversiones ya ejecutadas.

Asimismo, se establece que para proyectos férreos en el territorio nacional de sistemas de transporte público masivo de pasajeros que ya cuenten con un convenio de cofinanciación, la Nación podrá cofinanciar un monto superior al 70%.

Finalmente, el PND reconoce la posibilidad que, para los nuevos proyectos férreos del Sistema de Transporte Público de Pasajeros cofinanciados, el CONFIS podrá autorizar a las entidades territoriales la asunción de compromisos con vigencias futuras ordinarias o excepcionales hasta por el plazo de ejecución del proyecto de inversión o hasta el plazo del compromiso de financiación. Anteriormente, la autorización de vigencias futuras estaba limitada por el respectivo cupo sectorial para vigencias de proyectos de APP previsto en la Ley 1508 de 2012.

En este sentido, el fortalecimiento de la red férrea es imperativo para fortalecer el sistema intermodal en el país. Dicha tarea, sin embargo, presenta múltiples retos como por ejemplo la falta de una regulación técnica de este modo de transporte, lo cual podría eventualmente dificultar la operación del mismo. Con esto en mente, es claro que se requerirán esfuerzos por parte del Gobierno para movilizar los recursos necesarios para estructurar y adjudicar los proyectos que se requieren para activar los tramos de redes ferroviarias.

Por lo pronto, un avance importante es que el proyecto la Dorada Chiriguaná, bajo la modalidad de obra pública, está por ser adjudicado para ejecutar actividades de mantenimiento, conservación y mejoramiento de la infraestructura entregada de manera temporal para que, en el 2024, se adjudique una APP como solución de largo plazo.