Mariana Contreras
En los últimos años, Colombia ha mostrado un avance en la digitalización de los procesos migratorios, lo que impacta directamente en la migración corporativa. Actualmente, los trámites de visa pueden iniciarse en línea mediante formularios digitales que permiten adjuntar documentos y realizar pagos electrónicos, reduciendo la necesidad de desplazamientos presenciales. Migración Colombia ha centralizado varios de sus servicios en una plataforma web, a través de la cual es posible consultar y gestionar documentos de registro, permisos de estadía o movimientos migratorios, además de permitir registros que facilitan los controles en aeropuertos. Por su parte, la Cancillería ya permite apostillar y legalizar documentos mediante plataformas digitales, así como manejar al 100% los procesos de visado de manera online.
Para las empresas con movilidad internacional, estos avances representan una mejora, pues los procesos se vuelven más ágiles y transparentes, se optimiza la experiencia del extranjero que debe trasladarse y se reducen costos asociados al envío físico de documentos. Un ejemplo de ello es que el proceso de estampación de visas en pasaportes dejó de ser obligatorio en muchos consulados, siendo reemplazado por la visa digital.
Pese a los grandes avances, se mantienen retos que limitan el impacto de esta transformación. Uno de ellos es la falta de articulación entre entidades como Migración Colombia y el Ministerio de Relaciones Exteriores. A menudo, sus lineamientos difieren, lo que genera confusión entre los usuarios.
Otro desafío es la capacidad operativa de consulados y oficinas migratorias. Aunque las etapas iniciales se digitalizan, la aprobación final, la emisión física de documentos -cuando son exigidos- y ciertos controles presenciales aún consumen tiempo, generando incertidumbre sobre las fechas de inicio laboral de los extranjeros. Además, la falta de un criterio uniforme en los consulados respecto a la estampación de visas añade complejidad a los procesos.
Si bien las autoridades colombianas han avanzado en la normativa de transformación digital, aún existen dificultades en sus plataformas de trámites. Esta situación puede llegar a retroceder procesos e incluso poner en riesgo la vinculación de un extranjero en una empresa colombiana.
En conclusión, la digitalización de los trámites migratorios en Colombia ya constituye un factor transformador para la migración corporativa. Empresas y ciudadanos cuentan con herramientas antes inexistentes para agilizar visas y permisos. Sin embargo, para que estos instrumentos se conviertan en verdaderas oportunidades de eficiencia y competitividad, es necesario cerrar brechas de acceso digital, fortalecer la capacidad consular y garantizar marcos jurídicos y técnicos homogéneos que brinden certeza a todas las partes involucradas.
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