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  • Expansión - Madrid

sábado, 14 de mayo de 2022

Un juzgado de Barcelona determinó que sustituir a los pilotos no justifica acabar con un patrocinio, según las cláusulas del contrato

Antes de abandonar la Fórmula 1, Kimi Raikkonen fundó Ice 1 Racing, un equipo de motocross que más allá de las victorias que haya conseguido sobre el barro también acaba de ganar en los juzgados. En concreto el de lo mercantil número 10 de Barcelona. Y es que los jueces han reconocido que Fox, quien firmó un contrato de patrocinio con Ice 1 Racing, rompió este vínculo de forma anticipada sin que hubiera causa justa.

El proceso se inició el 11 de noviembre de 2017, cuando la marca Fox llegó a un acuerdo de patrocinio de tres años con el equipo de Raikkonen -desde el 1 de enero de 2018 hasta el 31 de diciembre de 2020-. La cuota anual se fijaba en 430.000 euros al año a lo que se sumaban variables en función de resultados y otros conceptos en forma de indumentaria para las carreras de los pilotos y productos de estilo de vida.

Entre las cláusulas para la rescisión del contrato se establecía que el patrocinador podía resolver el acuerdo si consideraba de forma argumentada que tanto pilotos como cualquier miembro del equipo les desacreditaba. También recoge el contrato que en caso de que uno o todos los pilotos resultaran lesionados por un periodo de más de 40 días, el equipo se comprometía a hacer "todo lo posible por encontrar pilotos de remplazo que sean capaces de competir al nivel profesional del actual equipo", teniendo derecho a romper el contrato si esto no se daba.

Este punto fue en el que se apoyó Fox para resolver el patrocinio con Ice 1 cuando el equipo decidió en agosto de 2018 sustituir a sus pilotos por otros más jóvenes y con un acreditado menor tirón comercial. La retirada y ruptura del contrato se ejecutó el 13 de diciembre, por lo que el equipo de Raikkonen reclamó 1,5 millones de euros como indemnización.

Los jueces, visto el caso, señalaron que en las cláusulas del contrato entre las partes no aparecía la posibilidad de que Fox pudiera intervenir en la estrategia deportiva del equipo. "El cambio de pilotos no tenía que ser ni negociado ni comunicado previamente al patrocinador aunque ese cambio pudiera tener repercusión en el rendimiento y proyección del equipo", aclara el juzgado catalán.

La defensa de Fox señaló que más allá de la lesión, la redacción del contrato con la palabra be injured trascendía lo físico para su capacidad de decisión sobre los pilotos. Los jueces no lo aceptaron y, aunque cabe recurso, condenaron a indemnizar con 595.00 euros a Ice 1 Racing.

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