Hija de Merlano y odontólogo no aceptaron los cargos tras la fuga de la excongresista

En la tarde de este sábado continúa en el juzgado 12 de Garantías la audiencia en contra de los primeros capturados tras la fuga de la excongresista conservadora Aída Merlano ocurrida el pasado martes sobre las 3:00 p.m. en un centro médico del norte de Bogotá. Se trata de Aída Victoria Merlano Manzaneda, hija de la hoy prófuga, y el dentista Javier Guillermo Cely Barajas.

En la sesión de la mañana se legalizaron las capturas y los procedimientos de allanamiento con los que el ente investigador recopiló elementos de prueba para presentar ante el despacho.

“Fue valiosa la ayuda del odontólogo Cely Barajas (…) no fue accidental sino fundamental. Permitió el espacio para que se cometiera la fuga y permitió, entre otras, que Merlano Rebolledo se cambiara de vestimenta en ese lugar”, dijo Jaime Duque, uno de los fiscales a cargo de la investigación.

Expuso que la fuga se venía planeando con antelación y que cada uno de los participantes tenía un papel fundamental a la hora cero del plan de escape.

De los hijos señaló que tenían la misión de ingresar en una maleta la cuerda de rapel por la que deslizó la interna de El Buen Pastor y que ese morral, posteriormente, fue sacado del centro médico por el propio dentista.

El delegado del búnker les imputó delitos por uso de menores en la comisión de delitos y complicidad en fuga de presos. En el caso del primero, según el ente acusador, por haberse válido de la ayuda del hijo menor de Merlano Rebolledo para el plan de fuga de la política conservadora.

Ninguno de los dos aceptó cargos por los delitos endilgados, por lo que, por el momento no tendrán ningún beneficio.

La audiencia continuará con la petición de medida de aseguramiento.