La Sabana pagó crédito de estudiante de medicina

Velázquez contó lo sucedido y añadió que la Universidad de la Sabana, tras ser notificada de la decisión del alto tribunal, incorporó a la estudiante a sus clases a pesar de que tenga un saldo pendiente con el departamento financiero.

Todo comenzó en el periodo 2010-2011 cuando Natalia Andrea Rubio de Plaza ingresó a la universidad. Para ese momento, la estudiante inscrita en la facultad de medicina solicitó un crédito con el Icetex para cubrir 50% de la matrícula, mientras La Sabana, bajo la modalidad de beca, le entregó el monto restante.

“Después en el primer semestre de 2012 ella perdió la beca del Icetex por rendimiento académico, y hasta 2015 recupera la ayuda de la universidad. Es decir, que en ese año, Rubio paga su matrícula con Icetex y la universidad solicita un crédito directo en un banco para ayudarle”, indicó Velásquez.

En ese sentido tras cursar más de dos años de carrera, Rubio pidió un crédito de estudios al Banco Pichincha en el cual la universidad le sirvió como fiador. Un año después, al ver los  incumplimientos de pago de la estudiante, la institución tuvo que pagar el crédito solicitado, y mediante una modalidad de acuerdo de pago, autorizó que la estudiante cursara ese año de estudio.

A raíz de esos incumplimientos financieros, la universidad decidió no renovarle la matricula. Fue entonces cuando, por medio de una tutela, Rubio argumentó que se le había violado el derecho a la educación.

En ese sentido, para la magistrada Gloria Stella Ortiz, encargada en el caso, a pesar de ser una institución privada, “la educación es un servicio público de todos que debe cumplir, al menos, con garantías de  asequibilidad, accesibilidad, adaptabilidad y aceptabilidad”.

Frente a esa moción, Velásquez afirmó que la Corte solicitó un acuerdo de pago de la estudiante con la universidad y que Rubio tendrá que cancelar el valor total para poder graduarse.