• Alejandra Rico Muñoz

miércoles, 22 de marzo de 2023

El Gobierno Federal ayudará a que los ahorros de los depositantes estén seguros, por lo que no perderían sus rescursos en el banci

Hace una semana el Silicon Valley Bank (SVB), uno de los bancos más influyentes de Estados Unidos, colapsó y se convirtió en la entidad financiera con la mayor crisis desde 2008.

La Corporación Federal de Seguros de Depósitos (o Fdic por sus siglas en inglés) tomó el control del banco el viernes y creó una nueva entidad llamada Banco Nacional de Seguros de Depósitos de Santa Clara.

Con este nuevo control del Gobierno Federal de EE.UU. se lograron asegurar los depósitos de los cuentahabientes, que podrían recuperar su dinero. Pero no es el mismo caso para los accionistas de la compañía, quienes sí tienen una alta probabilidad de perder su dinero.

El socio director en el despacho jurídico de la firma internacional Rimon LAW, Juan Zúñiga, aclaró los casos en los que los afectados por el colapso de SVB, podrían recuperar sus recursos.

Según explicó Zúñiga, el fin de semana todos los depósitos del SVB se transfirieron al nuevo banco. Sin embargo, la sociedad solo iba a asegurar hasta US$250.000 en efectivo de los depositantes. Los que tuvieran ahorros por montos mayores en SVB, obtendrían certificados de administración judicial para sus saldos no asegurados, lo que significaba que era posible que no pudieran sacar su dinero en el corto plazo.

“Cuando cae el banco los cuentahabientes solo tenían asegurado US$250.000 de sus depósitos por causa de una ley en Estados Unidos que los respalda. No obstante, en ese momento, cualquiera que tuviera más de US$250.000 ya no estaba asegurado por el total del monto”, aseguró Zúñiga.

Pero el experto de Rimon LAW aclaró que el Gobierno Federal, a través del Departamento de Tesorería, anunció que todos los depósitos, incluso los que están más arriba de US$250.000, van a ser honrados. “Es decir, los cuentahabienes no van a perder sus depósitos”.

Esto quiere decir, entonces, que si usted tenía US$1 millón depositado en el SVB, luego de la quiebra del banco, tendría US$250.000 asegurados por la reserva de Fdic, y los US$750.000 restantes estarían respaldados por el Gobierno Federal, que accedió a prestar todos los saldos al Fdic.

Este fue un gran alivio para muchos depositantes porque, como lo explica Zúñiga, el día del colapso de SVB era pago de nómina. “Tenemos clientes que ese viernes estaban en pánico porque dijeron ‘tengo US$2 millones que tengo que pagar en nómina y solo tengo acceso a US$250.000”, dijo.

¿Y los accionistas privados?

Según plantea Zuñiga, el Gobierno Federal no es responsable de asegurar el capital invertido en un banco como contribución. “Solo estaba viendo la situación para proteger a los cuentahabientes”, dijo.

Entonces, por orden del Gobierno de EE.UU., el banco se ve en la obligación de vender todos sus activos para pagar sus pasivos, lo que no llega a asegurar que los accionistas se vean retribuidos.

“Lo que se recibe primero de esos activos, va a los acreedores del banco y, si hay un remanente, solo en esa eventualidad, se realizará una distribución a los accionistas. Lo más probable es que los accionistas no van a recibir nada”, agregó.

¿Cómo le afecta a Colombia?

De acuerdo con un comunicado de la Superintendencia Financiera, el sistema financiero colombiano no tendrá un impacto significativo debido a que no hay inversiones directas de entidades colombianas en SVB.

Sin embargo, hay que esperar unos días para ver qué decisiones toman los reguladores de Estados Unidos y ver cómo se comporta el mercado para poder conocer los impactos en distintos sectores, aseguran los expertos.

“Por el momento, uno de los grandes interrogantes que se pueden plantear frente a la caída de SVB, es cómo afrontarán los bancos las necesidades de un sector como lo es el de las empresas de tecnología y startups. Un momento de crisis es el ambiente adecuado para conocer las falencias y generar mitigantes para corregirlas”, aseguró Camila Orrego, asociada senior en Cuatrecasas.

“Por esta razón, los bancos (tradicionales, neobancos y fintech) tienen una gran tarea de impulsar y potencializar el desarrollo tecnológico, con el objetivo de ofrecer productos y servicios a un sector que demanda agilidad, celeridad y eficacia, pues esperan que los servicios y productos recibidos hagan un match con el giro ordinario de sus negocios”, agregó Orrego.

Una de las preocupaciones de los expertos era que este momento de crisis en el sector se fuera a irradiar a Colombia. Sin embargo, Carlos Fradique-Méndez, socio senior de equipos financieros de Brigard Urrutia, “los efectos de la crisis de SBV en Colombia probablemente serán pocos y de muy corto impacto, gracias a la aplicación de normas de regulación prudencial y supervisión basada en riesgos”.

Varios abogados financieros estuvieron de acuerdo con esta premisa. “Situaciones como esta generan tensión en los agentes económicos. De hecho, simultáneamente con la caída de SBV se estaba presentado la de otro banco de Nueva York llamado Signature Bank, que participaba en un nicho de negocio orientado a activos digitales”, dijo Julián Aguirre, asociado de Posse Herrera Ruiz.

Sin embargo, parece ser que los mecanismos puestos en marcha por las autoridades de EE.UU. han mantenido su sistema financiero con un alto grado de confiabilidad y los efectos sistémicos generados por la caída de SBV parecen no ser dramáticos.

No obstante, el entorno macroeconómico global, de alta inflación y política monetaria endurecida, puede estar generando estrés en los balances de varios agentes económicos financieros.

Antecedentes

Las tasas altas de la Fed fueron una de las razones del desplome. Además, el SVB colocó más de la mitad de sus depósitos en bonos de Tesoro que, con la subida de tasas, perdieron valor. Varios clientes del sector de tecnología retiraron sus depósitos para tener una mayor liquidez, esto provocó que el SVB se viera obligado a vender un portafolio de bonos de US$21.000 millones y, por esta razón, asumió una deuda de US$1.800 millones.