lunes, 21 de noviembre de 2022
Mucho se ha hablado sobre el origen de este mundial, la cantidad de dinero que se repartió para que un país que solo tiene dinero pueda recibir 32 selecciones. Hace poco menos de dos semanas, el mismísimo Joseph Blatter admitió que el mundial de Qatar fue (o es) un error pero como dijo algún filósofo criollo “ya pa qué”. Este mundial dejó al descubierto todos los negociados que se cometen en nombre del fútbol y de los que nuestros dirigentes sudamericanos son campeones del mundo con muchos de presidentes de la época de la elección, en la cárcel.
Más allá de semejante adefesio, todo lo de este mundial es artificial, da dolor ver como paquistaníes disfrazados de españoles, ecuatorianos o belgas falsamente alientan a sus falsas selecciones con cantos falsos. Estadios gigantescos con muy poco público que luego del mundial serán olvidados. Todo es de icopor, empecemos por la fecha, apenas hace una semana se estaban jugando ligas europeas y aún hoy en Colombia se juega el torneo local; noviembre-diciembre no es época de mundial, jugadores lesionados, técnicos sin tiempo para armar un equipo, yo supongo que habrá equipos cuyos jugadores prácticamente no se conocen. Muchos jugadores lesionados antes de empezar el torneo y seguramente muchos caerán fecha tras fecha. De icopor también es la nueva tecnología para el fuera de juego, no sé cuántas cámaras deben instalar en esos estadios de icopor para intentar marcar esta jugada de manera automática, supongo que ni los grandes estadios europeos pueden montar esta infraestructura de cámaras y tecnología de punta; ni que pensar en nuestros destartalados estadios, una tecnología para decir que en Qatar hay dinero (lo sabemos) y que por eso se hace todo así.
La conducta que los aficionados deben observar al asistir a un partido es más digna de una gala de ópera que de un partido de fútbol sobre todo para las mujeres que en este país siguen siendo ciudadanas de segunda. Se recomienda no celebrar con demasiado entusiasmo no insultar y hasta evitar mostrar las suelas de los zapatos. Cerveza a precio de whisky 18 años sin alcohol que se debe tomar de manera casi clandestina en lugares apartados de los estadios. Quiero ver un partido Brasil Holanda o un Argentina Inglaterra guardando estos estándares de conducta, o los dejan celebrar o las cárceles de ese país van a quedar sin espacio para recibir hinchas exaltados por el triunfo o la derrota.
Ya se vio en el mundial de España como el jeque Fahid Al-Ahmad Al-Yaber Al-Sabah logró anular, desde la tribuna, un gol ¿Qué pasará en Qatar? Se ha hablado que el primer partido ya está “arreglado” por los apostadores e inclusive se da el marcador y como no es cero a cero, se sabe el tiempo en que se marcarán los goles. Ni que hablar de las casas de apuestas, con su dinero infinito también son omnipresentes, los únicos que no pueden apostar o ser parte de la publicidad de estas son los jugadores, de resto todos patrocinan, aconsejan o vive de las casas de apuestas.
Solo nos queda la esperanza de que Messi, Lewandowski, el coreano Son, Suarez, De Bruyne o cualquiera de las muchísimas estrellas no hagan olvidar el icopor, la cerveza sin alcohol, los aficionados de mentiras, las mujeres cubiertas hasta los talones y la opulencia. Este será el ultimo mundial de verdad, ya con 48 equipos será un carnaval que supongo lo verán cada vez menos personas. A pesar de todo lo anterior, que viva el mundial, un mes de puro fútbol y de muchas emociones, sin Colombia pero con Argentina y Messi. Bienvenidos al Mundial
