lunes, 11 de mayo de 2020

Esta es la primera crisis económica en la que el fútbol y el deporte en general van a salir maltrechos. Inclusive en la gran depresión de 1929 la serie mundial de ese año presentó estadios repletos. En los peores momentos de la anterior crisis, en el fútbol europeo, se manejaron transferencias de más de 50 millones de euros y los equipos siguieron gastando sin mayor inconveniente. Tenían el grifo de la televisión y uno de los escapes en épocas de vacas flacas es, por supuesto el fútbol.

Ahora es distinto, no hay televisión, no se puede ir al estadio y la actividad comercial desapareció. Los salarios, en cambio, permanecen inalterables. Es en estos momentos donde se van a descubrir los verdaderos dirigentes; manejar un equipo de fútbol, hasta hace menos de seis meses era relativamente sencillo.

Al finalizar esta semana empezará el fútbol en Alemania y poco a poco se jugarán los partidos restantes de los campeonatos que no se cancelaron. Faltan 11 fechas y acabará por allá el 27 de julio, si no ocurre nada excepcional. Seguirán Inglaterra y parece que España con alrededor de diez fechas por jugar. Quedaría menos de un mes, para iniciar la temporada 2020-2021 en el caso alemán.

Pasemos a Latinoamérica, es más fácil, nadie sabe nada, no se ha decidido nada. La situación a este lado del atlántico es realmente dramática, en Colombia nadie quiere saber de fútbol profesional, ni el gobierno ni, curiosamente, los fanáticos. El protocolo enviado al gobierno fue ignorado de manera tajante y ya se dijo, el fútbol no es prioridad.

Los derechos de televisión generalmente son la salvación de los equipos a nivel mundial; en el caso colombiano sirve para los equipos chicos, contrario a el resto del mundo, los equipos grandes no se benefician de estos dineros. Si en Europa no hay partidos con público, menos por estos lados. Supongo que venta de camisetas y otro tipo de equipamiento es prácticamente nulo.

¿Qué queda?, siempre está en el horizonte una transferencia a Europa que permita equilibrar las finanzas, situación que veo poco probable. Los equipos europeos, no van a tener mucho tiempo y tampoco dinero para mirar nuestros maltrechos equipos.

Tiene que haber soluciones creativas que permitan algún ingreso, por mínimo que sea. Buscando algunas ideas me encontré con lo que está haciendo el equipo alemán Borussia Mönchengladbach que por 19 euros le permite a los aficionados poner una foto en la tribuna en los partidos, los invito a mirar en internet esta iniciativa que según algunos datos le permitió al equipo recibir más de ochenta mil euros, que en algo ayudan. Los equipos de fútbol manejan una base de aficionados ávidos de, en la medida de sus exiguos recursos, colaborar con el equipo. La tecnología y la imaginación son las herramientas que tienen los equipos para intentar mejorar su situación.

Supongo que por el camino algunos equipos quedarán varados, aunque en Colombia hay muyo club que subsiste sin mayores problemas con lo entregado por televisión, al no tener base de seguidores, no necesitan abrir el estadio para ser económicamente viables, salarios bajos inferiores a lo que reciben por televisión. Diferente a los equipos con nóminas abultadas que subsisten por abrir dos veces al mes el estadio.

Esperemos a ver que irá a ocurrir con este maltrecho fútbol colombiano, que hasta ahora han recibido algunas ayudad de Conmebol y Federación Colombiana. Será la capacidad de sus administradores la clave del éxito y supervivencia económica.