jueves, 13 de enero de 2022
Las grandes transformaciones suelen ser el producto de circunstancias excepcionales, de eventos que nos retan y movilizan. Lo ocurrido en los dos últimos años es un ejemplo de ello, particularmente en el sector legal, el cual ha experimentado una acelerada transformación digital.
Un entorno cada vez más digitalizado genera retos para los diferentes actores de la industria legal, y gracias a ello, hoy podemos encontrar innovadoras formas de prestar servicios legales, el ingreso de nuevos actores de otros sectores, y el florecimiento de una generación de emprendedores disruptivos.
En este contexto, para el año 2022, es posible identificar algunas tendencias y condiciones para una mayor transformación digital en el sector legal en Colombia.
Flexibilización regulatoria
Las fuertes regulaciones de ciertos sectores de la economía son frecuentemente barreras para los innovadores. Los sandbox regulatorios se han constituido en una metodología que posibilita la innovación, mejores regulaciones y protección del consumidor.
A partir de la expedición de la ley de emprendimiento, Ley 2069 de 2020, se ordenó a los diferentes sectores de la administración pública, liderados por los ministerios, la creación de mecanismos exploratorios de regulación para modelos de negocio innovadores en industrias reguladas, con lo cual, en este año se esperaría un mayor uso de este mecanismo que se ha probado particularmente en el sector financiero.
Transformación digital de la justicia
En el sector justicia, e impulsado por la pandemia, se dieron importantes pasos que pueden permitir su transformación digital, en particular, se contempla una inversión importante de recursos.
Este año será crucial en el camino a la necesaria transformación del sector. Los retos son enormes, especialmente en materia de digitalización de la información, interoperabilidad y seguridad informática.
Desarrollo y apropiación de nuevas tecnologías
La adopción de nuevas tecnologías es necesaria para la prestación de los servicios legales de manera competitiva y eficiente. Hoy es frecuente el uso de software de gestión documental, la automatización de flujos de procesos y documentos, y el desarrollo de plataformas digitales para la interacción con los clientes y la venta de algunos servicios legales de baja complejidad.
Para este año, es previsible en el mundo el aumento de desarrollos que incluyen la adopción de tecnologías, como el blockchain y la Inteligencia Artificial, destinadas a la automatización de procesos más complejos, la generación y ejecución automática de contratos, y al análisis de datos y documentos.
Cambio cultural
En el proceso de transformación digital, el cambio más importante, complejo y lento, suele ser el cultural. Los servidores públicos, los abogados, profesionales, los estudiantes, los ciudadanos, entre otros actores, hacen parte de este proceso.
Este será un año determinante para el ajuste de planes de formación de los abogados, la creación de nuevos programas de educación formal y no formal, cuyo foco además del conocimiento técnico en nuevas tecnologías y derecho, deber ser el desarrollo de habilidades blandas requeridas para los actuales entornos laborales.
Estas son previsiones, pero en un entorno de incertidumbre, la resiliencia será nuestra principal habilidad para abrazar un nuevo año de retos en la aplicación de tecnología en el sector legal.
