viernes, 16 de octubre de 2020
La Administración de Justicia, el aumento de la litigiosidad y la exigencia de una más eficiente capacidad operativa para atender las demandas planteadas, convierte en imperativa la apuesta por la Inteligencia Artificial como sistema al servicio de la resolución de conflictos.
La transición actual de la sustitución de las aplicaciones informáticas, para la supresión de la tramitación manual de expedientes, el plan de justica digital (art 103 CGP) y los retos actuales de la administración de justicia, no puede alejarnos de la realidad que presupone un nuevo estadio evolutivo, de las posibilidades de software, por ejemplo, de reconocimiento de documentos o comprensión de números o caracteres, permitirían una tramitación instantánea a través de la generación automatizada de decisiones judiciales.
De este modo, la oportunidad de emplear la inteligencia artificial para ofrecer un mejor servicio público no debe aterrorizarnos, la implementación de técnicas de inteligencia artificial en el proceso un judicial, no se basa en reproducir el mismo enfoque, por el contrario, a partir de la IA, se puede redefinir estructuralmente el enfoque. Y ello, tiene un punto de partida concreto: transformar la lógica en el procesamiento y circulación de los datos y la información que subyace a las diversas actuaciones jurídicas.
Países como Estados Unidos y Argentina tienen diferentes sistemas informáticos que avanzan en los estrados judiciales, El programa Compas (Correctional Offender Management Profiling for Alternative Sanctions), que se usa en varios Estados de Estados Unidos. Se trata de un software que se utiliza para analizar, según los antecedentes penales de un acusado, sus probabilidades de reincidir.
En Argentina se creó Prometea en el ámbito del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El sistema, fue ideado e implementado pensando en la optimización del servicio de justicia, con el fin de agilizar exponencialmente los procesos judiciales en beneficio del ciudadano, en el cual, el programa permite organizar y establecer prioridades para el tratamiento de los casos más relevantes.
Nuestra Corte Constitucional en una iniciativa pionera en un máximo tribunal, adopto un programa de IA, el cual consiste un sistema predictivo de detección inteligente de sentencias e información llamado Pretoria para facilitar el trabajo de los jueces. Pretoria, creado con asesoría del Laboratorio de Innovación e Inteligencia Artificial (Ialab) de la Universidad de Buenos Aires, en alianza con la Universidad del Rosario, su función básica es desarrollar un análisis de selección y preselección de las tutelas que serán conocidas utilizando varios criterios que serán generados El sistema es capaz de leer e interpretar y a partir de allí realiza automáticamente la búsqueda de información de interés para la selección de las sentencias; la categorización siguiendo criterio de relevancia establecidos por la Corte Constitucional, la elaboración de estadísticas que permiten visualizar de manera integrar las tutelas presentadas en ese ámbito de la justicia. por el propio juez y no por el sistema. Así mismo, el cual realiza un análisis estadístico de todo tipo, que le va a permitir al operador judicial no solamente tomar decisiones jurídicas, la IA permitiría convertir el proceso judicial en un esquema eficiente de base digital, transparente, inteligente, supervisado y, lo más importante, al servicio de la tutela sin dilaciones que todos merecemos.
