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miércoles, 23 de noviembre de 2022

El uso de una incapacidad médica alterada no solamente tiene implicaciones laborales, como el despido; también es un delito

Aunque varias empresas han optado por flexibilizar sus horarios o poner televisiones y radios en sus instalaciones para que sus empleados puedan ver el Mundial de Catar 2022, no todas tienen esa posibilidad. Los más afiebrados del torneo de fútbol más importante podrían verse tentados a faltar al trabajo para ver algún partido, valiéndose, por ejemplo, de una incapacidad falsa. Sin embargo, esto no solo puede llevar a su despido; tiene también consecuencias penales.

Desde el punto de vista laboral, faltar al trabajo usando como excusa una incapacidad médica falsa es equivalente a una ausencia sin permiso ni justa causa.

Lo primero que pueden hacer los empleadores en ese escenario es no pagar el día no trabajado, en la medida que no hay obligación de remunerar un servicio que no se prestó.

“El salario se debe pagar al trabajador siempre y cuando esté prestando el servicio. Por ejemplo, si algún día el trabajador decide no ir al lugar de trabajo, sin ninguna justificación válida, el empleador no está en la obligación de pagarle el salario correspondiente a las horas de trabajo de la jornada a la cual no asistió”, explicó recientemente Diana Zuleta, socia en DLA Piper Martínez Beltrán.

Adicionalmente, las compañías pueden adelantar un proceso disciplinario que podría concluir en el despido con justa causa.

“Lo más probable es que vaya más allá del no pago y se inicie un procedimiento sancionatorio. Este inicia con un llamado de atención formal (por escrito) y una suspensión del contrato de trabajo hasta por ocho días, si es la primera vez. Si es reincidente, la suspensión, que implica el no pago, puede ser hasta por dos meses”, explicó Juanita González, abogada en Álvarez Liévano Laserna.

Es importante, para garantizar la validez de la decisión, que se respete el debido proceso en todas las etapas del disciplinario, adelantando entre otros un llamado a descargos. Esto, para evitar que posteriormente un juez invalide el despido y ordene el reintegro del trabajador, o el pago de una indemnización, por considerar que no se cumplieron los requisitos para un despido con justa causa.

Ahora, teniendo en cuenta que la falsificación de documentos es un delito, la empresa podría, además de despedir al trabajador que presentó una excusa médica falsa, denunciarlo penalmente por falsedad en documento privado.

Según el artículo 289 del Código Penal, “el que falsifique un documento privado que pueda servir de prueba, incurrirá, si lo usa, en prisión de 16 a 108 meses”. Además, explicó el penalista Iván Cancino, el artículo 291 del citado Código establece que “el que sin haber concurrido a la falsificación hiciere uso de documento público falso que pueda servir de prueba, incurrirá en prisión de cuatro a 12 años”.

Entonces, teniendo en cuenta que presentar una incapacidad médica falsa podría incluso dar cárcel, es importante que los trabajadores piensen dos veces antes de recurrir a este mecanismo para faltar al trabajo para ver los partidos del mundial.

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