• Expansión - Madrid

sábado, 10 de septiembre de 2022

El ambicioso proyecto que inició Juan Picón con su fichaje a finales de 2017 sigue creciendo, aunque no ha crecido como podría parecer

Los despachos estadounidenses están de moda. Las empresas de ese país demuestran una gran fortaleza aupadas por las turbulencias económicas que sufren sus socios europeos los últimos años, ahora en puntos máximos por culpa de la guerra en Ucrania y sus efectos en la economía. Y todo esto también impacta, positivamente, en sus asesores legales que están creciendo en las plazas más importantes de todo el mundo, incluidas la city londinense o Madrid.

En España, el máximo exponente de esta filosofía es Latham & Watkins, dirigido por Ignacio Gómez-Sancha desde julio de 2019. La firma con sede central en Los Ángeles llegó a España en 2007 con un perfil bajo en un aterrizaje que coincidió con los inicios de la gran crisis de 2008.

Con presencia cada vez más relevante en los rankings de operaciones (el verdadero objetivo de Gómez-Sancha), el ambicioso proyecto que inició Juan Picón con su fichaje a finales de 2017 sigue creciendo, aunque no tan rápido como podría parecer con algunos fichajes de gran calado que copan los medios. El último de ellos ha sido el de Alejandro Ortiz, hasta entonces socio senior de Linklaters.

La llegada de Ortiz, que sigue los pasos del que fuera compañero de despacho, Pedro de Rojas, que se unió a la firma americana en 2021, completa la docena actual de socios españoles de Latham & Watkins, una cifra que se empieza a acercar a las que tienen otros bufetes internacionales con los que se encuentra habitualmente en las grandes operaciones, como Allen & Overy (19), aunque aún lejos de otras firmas más veteranas en el país, como Clifford Chance (24), en Madrid desde 1980.

Sin embargo, estar por debajo en número le obliga a participar en menos operaciones, eso sí siempre con gran sofisticación y componente multijurisdiccional.