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martes, 13 de septiembre de 2022

El fotógrafo Robert Barbera presentó la acción porque la cantante publicó en su Instagram una foto tomada por él sin permiso

La semana pasada la cantante Miley Cyrus se sumó a la lista de celebridades demandadas por usar fotos de sí mismas, tomadas por paparazzi, en sus redes sociales.

La acción judicial por infracción de derechos de autor la interpuso el fotógrafo Robert Barbera, quien argumentó que la cantante de ‘Wrecking Ball’ republicó en su cuenta de Instagram, en 2020, una foto tomada por él sin un previo acuerdo de licencia o permiso.

El alegato principal es que, por su “inmensa presencia” en Instagram, donde cuenta con 180 millones de seguidores, acabó con cualquier posibilidad del autor de monetizar la foto a través de un acuerdo de licenciamiento. De encontrarse culpable, podría pagar unos US$150.000 en daños.

Y decimos que Cyrus se suma a la lista porque otros artistas y famosos, como Dua Lipa, Justin Bieber, Ariana Grande, LeBron James o Katy Perry, han enfrentando procesos judiciales por la misma razón en los últimos años.

De hecho, recordó la publicación Billboard, el fotógrafo se ha ganado una reputación por este tipo casos, pues fue el demandante en los procesos contra Bieber y Grande en 2019, que terminaron en un acuerdo confidencial, y en el que enfrenta Ariana Grande, que sigue en etapa de juicio al haberse presentado apenas en junio.

Por absurdo que pueda parecer, la ley de derechos de autor de Estados Unidos está del lado de los paparazzi, pues establece que los fotógrafos tienen derecho sobre las imágenes que tomen y usarlas sin licencia es una infracción. En ese sentido, aparecer en la foto no da derechos de copropiedad o la facultad de usarlas sin pagar por ello.

“Que las celebridades sean el sujeto de una foto no quiere decir que tengan algún derecho de propiedad sobre ella”, dijo a Billboard la abogada Nancy Wolff, especialista en derechos de autor en Cowan DeBaets Abrahams & Sheppard.

¿Podrían los famosos, a su turno, demandar a los paparazzi por tomarles fotos sin su consentimiento? No, a menos que se hagan en un espacio en el que tendrían una expectativa razonable de privacidad, como sus casas, o cuando violen sus derechos de publicidad.

Esa, justamente, fue la queja de Khloé Kardashian hace cuatro años, después de haber enfrentado un proceso similar. “Pueden acecharme y acosarme legalmente y después, tras de todo, no puedo ni siquiera usar las fotos que toman de mí”, dijo en un trino.

RIGHT!!! They can legally stalk me and harass me and then on top of it all I can’t even use the pictures of myself they take LOL what the fuck is this

— Khloé (@khloekardashian) August 19, 2018

De vuelta al caso de Cyrus, la cantante se enfrenta a dos escenarios: o el fotógrafo pide una suma concreta por concepto de daños, con lo que entrarían en una disputa sobre cuánto dinero dejó de recibir por no poder licenciar la foto en pleito; o irse por los establecidos en la legislación norteamericana, que pueden ir hasta US$150.000 por la infracción.

Sin embargo, lo cierto es que la mayoría de estos casos no llegan a las últimas instancias de juicio y, en cambio, se resuelven en conciliaciones económicas privadas, que posiblemente, dice Billboard, rondan las decenas de miles de dólares por tratarse de una sola obra.

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