• Colprensa

viernes, 28 de marzo de 2014

La delegación de paz de las Farc respondió la carta que les hizo llegar el expresidente de la República Andrés Pastrana Arango en la que afirma que el secretismo de la mesa de conversaciones de paz en La Habana (Cuba), “es una olla que ya empieza a oler mal”.

En la misiva enviada por el expresidente, éste resalta que durante el proceso de paz San Vicente del Caguán (1999 y 2002), “no se hicieron componendas con el gobierno a puerta cerrada” con el entonces máximo jefe de las Farc, Pedro Antonio Marín, alias ‘Manuel Marulanda Vélez’ o ‘Tirofijo’.

Pastrana también aseguró que él, como Presidente, “ponía sobre la mesa, con plena transparencia, hasta el último punto de su prestigio”.

Ante esto, Jorge Torres Victoria, alias ‘Pablo Catatumbo’ respondió afirmando que Pastrana “es un hombre que respira por la herida”, puesto que “pudo haber concretado la paz con las Farc, de no ser por sus incumplimientos en el proceso”.

Esta afirmación la sustenta recordando dos ocasiones durante el fracasado proceso de paz de San Vicente del Cagüán, cuando Pastrana pactó dos acuerdos con las Farc, los cuales no habría cumplido.

El primero -dice- se dio con respecto al desmontaje del paramilitarismo, el cual fue establecido como condición para dar inicio a los diálogos del Cagüán. Según el negociador de las Farc, el expresidente Pastrana habría hecho todo lo contrario “promoviendo la expansión de este fenómeno”.

El segundo compromiso al que Torres Victoria hace referencia es a la posibilidad de no culminar satisfactoriamente el proceso de paz, en el que Pastrana se habría comprometido a conceder dos o tres días para que los guerrilleros pudieran retirarse del área e iniciar de nuevo las operaciones militares.

Según el negociador, esta promesa también se incumplió puesto que “mientras Pastrana estaba leyendo públicamente el comunicado donde anunciaba el rompimiento de los diálogos, ya estaban sonando las primeras bombas en los campamentos de las Farc”.