• Adriana Amarís Silva

viernes, 14 de agosto de 2020

El covid-19 ha paralizado al mundo, millones de personas permanecen en sus hogares en confinamiento, los países decretaron cuarentenas, cerraron sus fronteras y la economía global se encuentra detenida. De hecho, las proyecciones recientes del FMI apuntan a una caída del -4,9% en el crecimiento mundial para 2020.

Como medida para evitar la propagación del virus, las restricciones de carácter migratorio han sido contundentes, impactando negativamente aún más la economía global, No obstante, la recuperación de los países y el desarrollo del comercio internacional dependerán, considerablemente, de la movilidad migratoria.

¿Qué se espera para la movilidad de personal en el corto plazo?
Posiblemente la movilidad de personal y los procesos migratorios involucrarán mayor rigurosidad. Pues estos tendrán como objetivo regular el ingreso de personas que puedan acarrear un riesgo adicional, no sólo para la salud de los habitantes de un país, sino para la fuerza laboral y las tasas de desempleo locales.

Esta situación plantea un reto mayúsculo para los gobiernos pues estos deberán promover la reactivación económica que depende, en gran medida, de los negocios transfronterizos, y por otra parte, controlar tanto sus fronteras como la propagación del covid-19.

Además de las medidas de control, ¿qué herramientas serán útiles para lograr la reactivación?
A pesar de la rigurosidad que podría evidenciarse en el tema de los procesos migratorios, este es un momento clave para la firma de acuerdos de cooperación entre los Estados, como medida para incentivar el comercio entre los países.

Esto deberá resultar en prerrogativas para las partes, entre las cuales se podría encontrar la migración y movilidad de personal de negocios o con fines laborales, que estimulen el intercambio de bienes y servicios, así como el desarrollo de todas las industrias.

Es precisamente aquí donde la globalización es una oportunidad y se consolida como eje esencial de la economía global, pues el trabajo conjunto de los gobiernos, con empresas locales e internacionales, será fundamental para restablecer y reactivar el tejido económico global.

¿Cuál será el papel de las partes involucradas en el proceso migratorio?
Nuestro rol como asesores es prepararnos para nuevas restricciones en las jurisdicciones y estar a la vanguardia en relación con las tendencias y políticas que se implementen en cada país, para así plantear estrategias eficientes.
Las compañías deberán prepararse para experimentar cambios importantes en los procesos de movilidad, pues si bien la movilidad global jugará un papel esencial en la reactivación económica, será necesaria la adaptación a procesos migratorios más extensos y complejos.

Será fundamental que las políticas de movilidad para los empleados de las compañías se encuentren fortalecidas.

Pues a pesar de que una de las aristas principales para la reactivación económica será el movimiento de trabajadores y ejecutivos como parte de la estrategia para estimular el intercambio de bienes y servicios a nivel global, la tendencia será un posible proceso migratorio riguroso, pero a la vez ineludible para lograr la recuperación de la economía mundial.