¿Qué es un FCP inmobiliario?
Un FCP inmobiliario es un fondo de inversión colectiva cerrado, cuya política de inversión prevé la posibilidad de destinar hasta el 100% de los aportes de los inversionistas a inversiones en activos inmobiliarios, tales como bienes inmuebles, titularizaciones inmobiliarias, acciones de empresas que a su vez inviertan en inmuebles, o derechos fiduciarios representativos de participaciones en activos inmobiliarios. Desde 2007 bajo el Decreto 2175 en el país era posible crear FCP inmobiliarios, cuyas decisiones de inversión eran tomadas por gestores profesionales.
Una vez se crearon los Fici con el Decreto 1242 de 2013, se limitó la posibilidad de crear FCP inmobiliarios pues se estableció que en el evento en que la política de inversión del FCP previera una concentración en activos inmobiliarios igual o superior al 75% era obligatorio constituirlo bajo la naturaleza de Fici.
¿Cual es la diferencia entre un FCP y un Fici?
La diferencia entre los dos vehículos de inversión radica en que la sociedad administradora de un FCP puede contratar a un gestor profesional, persona natural o jurídica, para que invierta y gestione los activos que integran el portafolio del fondo.
En el caso de los Fici, la sociedad administradora únicamente puede contratar gestores externos que sean entidades vigiladas por la SFC, los cuales podrán ser comisionistas de bolsa, sociedades fiduciarias o sociedades administradoras de inversión, con el objetivo de delegar en éste la gestión del portafolio y la responsabilidad por las decisiones de inversión.
En ese sentido, los Fici únicamente pueden tener gestores extranjeros o gestores externos constituidos como entidades sometidas a vigilancia de la Superintendencia Financiera de Colombia, mientras que los FCP pueden tener gestores profesionales no vigilados, que en el caso de activos inmobiliarios, se trata de constructores, promotores o expertos inmobiliarios.
¿Porqué era necesaria la reforma?
Permitir la existencia de FCP inmobiliarios es necesario teniendo en cuenta que el conocimiento y la experiencia en la gestión de activos inmobiliarios está en cabeza de los gestores profesionales. Con casos de éxito como Inverlink, Abacus y Terranum Capital se evidencia la confianza de inversionistas institucionales en la gestión de activos inmobiliarios por parte de profesionales expertos en el negocio inmobiliario, lo que refuerza la necesidad de permitir que un vehículo de inversión inmobiliario pueda ser gestionado tanto por entidades vigiladas por la Superintendencia Financiera como por gestores profesionales.
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