Colprensa
viernes, 29 de julio de 2022
La marca Colegio de Chicalá logró registrarse ante la Superindustria, a pesar de la oposición del Club Campestre Altos de Chicalá
La Caja Colombiana de Subsidio Familiar, Colsubsidio, se presentó ante la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) con el objetivo de solicitar el registro de la marca Colegio Colsubsidio de Chicalá (mixta), que distinguiría servicios de la clase 41 de Niza, que se refiere a todo lo relacionado con servicios de educación, formación e instrucción, enseñanza y capacitación en todos los niveles y modalidades del sistema educativo, servicios educativos como preescolar, primaria y bachillerato.
Sin embargo, a la solicitud se opuso el Club Campestre Altos de Chicalá, alegando que esta era irregistrable, según lo establecido en el artículo 136. La opositora argumentó que el uso de la expresión ‘Altos de Chical’ ha sido utilizada desde la creación del Club en 1997, cuando se constituyó como sociedad. Y que desde hace más de 35 años, la organización ha utilizado este nombre, ya sea de manera constante o interrumpida, para ofrecer los servicios de entretenimiento, servicios de comidas y bebidas, entre otras cosas.
“La marca solicitada es idéntica fonética, gráfica y conceptualmente al nombre comercial y a la enseña comercial de la sociedad opositora”, expresó el Club Campestre de Chicalá.
Por otro lado, dijo que distinguían servicios de la clase 41, por esta razón, algunos de estos servicios se cruzan a la hora de estar compitiendo en el mercado, pues, por ejemplo, con el uso de ‘Chicalá’, los consumidores pueden llegar a confundirse con las marcas ya registradas, como el ‘Club Campestre Altos de Chicalá’.
A pesar de que Colsubsidio vaya a prestar el servicio de educación, la opositora recalcó que los clientes pueden asociar estas expresiones.
En cuanto a las declaraciones de la oposición, la defensa recalcó que el uso de la expresión ‘Colsubsidio’ hace parte de las familias de marcas en la que se incluiría la solicitante.
“No es necesario llevar a cabo un análisis de conexidad competitiva entre los productos y servicios que distinguen los signos enfrentados”, añadió la marca. Por otro lado, la defensa mencionó que ya cuentan con los derechos de la clase 41 y llevan más de seis años con el Colegio.
Después del análisis que realizó la Superindustria, decidió que la marca podía registrarse sin afectar a la oposición o confundir a los consumidores.
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