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martes, 5 de julio de 2022

Varias denuncias apuntan a que había cobro de coimas y corrupción en la selección de los proyectos a ejecutar con los recursos

El escándalo de la semana pasada corrió por cuenta del presunto cobro de coimas para direccionar la selección de los proyectos que se ejecutan con las regalías del Ocad-Paz. Aunque son varios los personajes mencionados en el entramado y todavía hay que establecer las responsabilidades, hay quienes ven en la reforma que se hizo al Sistema General de Regalías (SGR) hace dos años una de las causas que facilitaron los hechos denunciados ahora.

Según se lee en los oficios radicados ante los organismos de control, desde el año pasado habría irregularidades en el proceso de selección de los proyectos a ejecutar con los recursos del Ocad en los municipios Pdet. Funcionarios de la Contraloría y el Departamento Nacional de Planeación (DNP), en alianza con algunos congresistas, habrían pedido sobornos de al menos $500.000 millones para seleccionar que se ponían a consideración del Ocad-Paz para desembolsar el dinero.

Ahora, ¿qué relación tiene el caso con la reforma que se hizo al SGR hace dos años? Para evaluarlo es necesario entender los cambios que se hicieron, que surgieron de un acto legislativo presentado en 2019 por varios congresistas de distintos partidos y el Gobierno Nacional, cuando el ministro de Hacienda era Alberto Carrasquilla, Gloria Amparo Alonso estaba el frente del Departamento Nacional de Planeación (DNP) y el Ministerio de Minas y Energía estaba en cabeza de María Fernanda Suárez.

Buena parte de la atención pública durante la discusión de esa iniciativa se concentró en los incentivos tributarios que se establecían en el proyecto para las empresas que desarrollaran el fracking. El artículo, que había sido aprobado en la Cámara de Representantes, se cayó en la conciliación.

Mientras esa discusión ocupaba los titulares, otros congresistas advertían, de manera más silenciosa, que la reforma, al eliminar controles como los Ocad, podría redundar en más recursos asignados directamente a los municipios y departamentos. Lo anterior, en sí mismo, no tendría nada malo, pero no hay que olvidar que el término mermelada, que en el imaginario colectivo se asocia con corrupción, fue acuñado por el exministro de Hacienda, Juan Carlos Echeverry, en una reforma al sistema de regalías.

Una de las mayores quejas que había en su momento era el exceso de Ocad tripartitos, lo que generaba burocracia y hacía más lenta la aprobación y ejecución de los proyectos. Ese, justamente, fue uno de los ejes de la iniciativa.

“Uno de los cambios más importantes de la reforma fue la eliminación de los más de 1.000 Ocad tripartitos que había, con el propósito de generar más eficiencias. El riesgo era que con el nuevo esquema se aumentaba la participación e injerencia de los mandatarios locales, nosotros tratamos de frenar eso y no pudimos”, recordó la senadora María del Rosario Guerra.

La simplificación de la estructura que llegó con la eliminación de los Ocad, efectivamente aumentó la discrecionalidad en la asignación de recursos, lo que ha sido señalado por algunos como el origen del escándalo de Ocad-Paz. Sin embargo, dijo Luis Alberto Rodríguez, exdirector del DNP, esa conexidad no es precisa. En eso concuerda el exministro de Minas y Energía Amylkar Acosta, quien explicó que si bien la eliminación de los Ocad aumentó el margen de acción discrecional, en general, no fue así para las regalías de la paz.

LOS CONTRASTES

  • María del Rosario GuerraSenadora

    “Uno de los cambios más importantes de la reforma fue la eliminación de los más de 1.000 Ocad tripartitos que había, con el propósito de generar más eficiencias”.

  • Amylkar AcostaExministro de Minas

    “Este escándalo no tiene que ver con que haya discrecionalidad o no, porque los recursos pasaron por el Ocad-Paz, entonces ese no es el factor de corrupción”.

“En el caso de los recursos de la paz, que fundamentalmente van a los Pdet, sí hay un órgano colegiado que decide, que era el que presidía el consejero Emilio Archila. Este escándalo no tiene que ver con que haya discrecionalidad o no, porque los recursos pasaron por el Ocad-Paz, entonces ese no es el factor que dio lugar a la corrupción”, anotó.

El extitular de la cartera, incluso, fue más allá y señaló que para buscar el origen de lo que facilitó el escándalo habría que analizar los cambios en las normas con la suspensión temporal de la ley de garantías, cuando “la contratación aumentó significativamente, especialmente en algunas regiones, y buena parte con recursos que venían del Sistema General de Regalías”.

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