• José Elías Del Hierro Gamboa

viernes, 22 de abril de 2022

Estamos viviendo el “boom” de las startups en Latinoamérica. Hoy no solo hablamos de unicornios, oímos sobre “Decacornios” y “Hectocornios” debido a las grandes dimensiones que han alcanzado estas organizaciones y a la explosión de venture capital en el mundo.

Estas organizaciones han introducido innovación en el mercado y canalizado grandes cantidades de recursos, generando curiosidad sobre la fórmula utilizada.

Aunque dicha “fórmula” no existe, en el gobierno corporativo se esconde un tesoro que, de encontrarse, cataliza la perdurabilidad, sostenibilidad, productividad y escalamiento de estas organizaciones.

¿Qué es el gobierno corporativo?

“Al que no sabe para donde va, cualquier bus le sirve”. Esta frase representa el reto cotidiano del gobierno corporativo en las startups, pues en un ecosistema eminentemente acelerado, es un sistema que facilita dirigir y controlar una organización mitigando los riesgos y acelerando el paso.

Este sistema es relevante sin perjuicio del tamaño o del nivel de desarrollo de la startup y tiene como marco de acción las interacciones que puedan existir entre los socios, la junta directiva, los inversionistas, la administración, órganos de fiscalización y otras partes de interés.

Está sostenido en cuatro pilares fundamentales: transparencia, equidad, rendición de cuentas y responsabilidad corporativa.

¿Cómo ayuda el gobierno corporativo a las startups?

Caminar por las sendas del gobierno corporativo permitirá a la startup controlar la estrategia, las personas y recursos, la propiedad industrial y los procesos organizacionales, para alcanzar productividad, sostenibilidad y perdurabilidad en el tiempo.

Este camino es una apuesta de largo plazo al que es mejor lanzarse temprano. Si bien las bondades son amplias, las repercusiones de no lanzarse pueden ser críticas. Por nombrar algunas: conflictos entre socios, pérdida de inversionistas o ventas, disputas judiciales por la propiedad industrial o conflictos laborales y multas de las autoridades.

¿Cuándo debe una startup pensar en gobierno corporativo?

No existe fórmula mágica para responder a esta pregunta, sin embargo, existen prácticas de gobierno corporativo para cada etapa de desarrollo de una startup y por ello, el momento de implementarlas es ahora.

Como un ejemplo sencillo, una startup que se encuentra en etapa de ideación debe ocuparse de establecer en un acuerdo de fundadores relativo a las expectativas que tienen en términos de aportes, remuneración, entrada o salida de fundadores, mecanismos de resolución de conflictos. Adicionalmente, deberá ocuparse de controlar adecuadamente el flujo de caja y de definir muy bien la titularidad de la propiedad intelectual, dominios y software que tengan en ese momento.

En etapas más avanzadas como la validación de mercado, la tracción y la escala se implementarán otras prácticas, siempre encaminadas a dirigir y controlar la estrategia, las personas y los recursos, la propiedad intelectual y los procesos, en el marco de los pilares fundamentales mencionados anteriormente.

Este boom que estamos viviendo en Colombia y Latinoamérica puede ser todavía mayor si emprendemos el camino a encontrar ese tesoro que se esconde detrás del gobierno corporativo.