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  • Diego Alejandro Ospina Henao

miércoles, 5 de octubre de 2022

Si un ciudadano cree que le están vulnerando un derecho fundamental puede interponer el recursos sin necesidad de un abogado

Una de las grandes novedades que introdujo la Constitución de 1991 fue la tutela, un mecanismo que vela por que a ningún ciudadano se le viole el acceso a sus derechos fundamentales, como la salud, y ofrece una alternativa para, a través de las autoridades judiciales, lograr esa protección inmediata, cuando hay una vulneración.

Es importante tener en cuenta que no es necesario tener un abogado para presentar una tutela. También, que se trata de un instrumento subsidiario, es decir, solamente se puede interponer cuando no hay otra vía legal para resolver el problema, y solamente es admisible cuando lo que está en riesgo es el acceso a un derecho fundamental. La vida, libertad, libre desarrollo de la personalidad, intimidad, libertad de conciencia, libertad de cultos o libertad de expresión, entre otros, son tutelables.

“Es el mecanismo más importante creado por la Constitución del 1991. En Colombia no hay exceso de tutelas, sino la frecuente vulneración de derechos y eso es lo que se debe contrarrestar, esta es una de las causas de la congestión judicial, no la tutela”, dijo Kenneth Burbano, director del Observatorio Constitucional de la Universidad Libre.

¿Qué hay que hacer para interponer una tutela?

Como explica el portal LegalApp, del Ministerio de Justicia, el ciudadano que quiera presentar este recurso debe acudir ante cualquier juez del lugar donde ocurrió el episodio y presentar, de forma verbal o escrita, la solicitud de tutela, incluyendo: los datos de identificación, hechos que motivan la acción, derechos presuntamente vulnerados, entidad que los cometió la infracción y la solución que se propone para resolver el problema.

Por ejemplo, si a usted la EPS le niega los medicamentos, puede presentar una tutela argumentando que, con esos hechos, se vulnera su derecho a la salud, con lo que la solución sería que le entreguen los remedios que le fueron negados.

Una vez presentada la tutela, el juez tiene 10 días para analizarla situación, practicar pruebas y tomar una decisión. Si en ese término encuentra que, efectivamente, hubo una vulneración o amenaza de violación a un derecho fundamental, dará órdenes a los responsables para que resuelvan el caso.

Puede suceder que una de las partes, quien puso la tutela o quien fue "entutelado", no esté de acuerdo con la decisión del juez, caso en el que tiene tres días, desde que le comunican la decisión, para presentar la impugnación argumentando su inconformidad.

Además, si el juez ordena la protección de un derecho, y quien está obligado a cumplir la orden no lo hace, el tutelante puede presentar un incidente de desacato, que es un recurso que se presenta ante el mismo juez en el que se pide el cumplimiento de la orden e, incluso, una sanción con multa o arresto a quien se niega a cumplir la orden judicial.

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